El repunte de los feminicidios debería generar alarma social e institucional, opinó hoy el consejero de Presidencia, Justicia e Igualdad del Gobierno canario, Francisco Hernández Spínola, quien añadió que, además de ese aumento la violencia machista pervive entre jóvenes y adolescentes.

Durante la inauguración de una jornada sobre el tratamiento policial de la violencia de género y el encaje de la mujer en la Guardia Civil, organizada por la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), el consejero dijo que es preciso atajar sin demora ese tendencia de aumento de los feminicidios.

Por ello, Francisco Hernández Spínola reclamó un pacto de Estado, que a su juicio es urgente para atajar lo que considera un problema de Estado.

Francisco Hernández Spínola insistió en que lograr la plena igualdad de la mujer en todos los ámbitos de la sociedad y erradicar la violencia machista son los dos aspectos fundamentales para lograr una sociedad más justa y democrática.

Violencia de género y desigualdad están estrechamente unidas, manifestó el consejero, quien reiteró que no se trata de un problema exclusivo de las víctimas directas, las mujeres y sus hijos, ni de las personas de su entorno, sino que es algo público.

Recordó Francisco Hernández Spínola que desde 2000 en España han sido asesinadas 900 mujeres, 80 de ellas en Canarias, y que en lo que va de 2014 el número de asesinatos machistas asciende a veintiocho en el Estado, de los que uno se ha cometido en el archipiélago canario.

Y la crisis no puede ser una excusa para avanzar en la lucha contra la violencia machista, pues las víctimas no pueden esperar a que se produzca la recuperación económica, destacó el consejero, quien añadió que se trata de un acto de violación de los derechos humanos.

El consejero de Presidencia, Justicia e Igualdad del Gobierno canario subrayó la labor que desde las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se realiza para garantizar la seguridad de las mujeres que viven situaciones de violencia machista, y apuntó que es difícil atajar esas acciones en zonas rurales, debido a que la mujer tiene más miedo a hacer visible su situación.

Es difícil conocer con exactitud la magnitud del problema en el ámbito rural, si bien se cree que por cada mujer que denuncia diez no lo hacen, comentó Francisco Hernández Spínola, quien afirmó que la denuncia es el primer paso para salir del círculo vicioso de la violencia machista y muchas mujeres lo están consiguiendo.