Un edificio, con una antigüedad cercana al siglo de existencia, no parece, en principio, el lugar más adecuado para acoger a personas mayores dependientes, con lógicos problemas de movilidad y requerimientos.

El hospital geriátrico de Febles Campos forma parte de la red de centros de asistencia sociosanitaria del Cabildo y, si bien a lo largo del tiempo ha sido objeto de distintas reformas en su estructura, con el fin de adaptarlo a las necesidades que marcaban tanto la demanda como la legislación, estos sucesivos "parcheos" no han resuelto su evidente "vejez".

Como respuesta a este problema, el consejero delegado del Instituto de Atención Social y Sociosanitaria (IASS), Miguel Ángel Pérez, señalaba la firme intención de su departamento en cuanto a acometer, con recursos propios del Cabildo, una obra de reforma integral del inmueble, con cargo a los presupuestos del 2015.

"Los técnicos se encuentran ya elaborando el proyecto constructivo y nuestra intención es que los trabajos se liciten lo antes posible, para que las obras comiencen el próximo año".

A raíz de la caída que sufrió un usuario de unos 80 años el pasado 4 de julio, al precipitarse por las escaleras desde el cuarto piso con su silla de ruedas y fallecer, desgraciadamente, dos días después, el domingo, desde la Corporación insular se abrió un proceso interno de investigación para determinar las causas que rodearon tan fatal accidente.

Los informes técnicos vienen a certificar, de una parte, la idoneidad de las medidas contraincendios de que dispone el edificio y las pautas de seguridad contra caídas en la zona de entrada a la escalera donde tuvo lugar el accidente.

Las conclusiones subrayan, entre otros aspectos, que la escalera se adapta a la normativa de aplicación de seguridad laboral y a las normas básicas de edificación.

Que todas las entradas de las escaleras desde el pasillo disponen de barandillas a modo de hoja de puerta; que impiden al acceso por la parte baja para evitar caídas y disponen de un cerrojo autocierre mediante muelle, que permite cerrar la puerta con un simple movimiento hasta el final.

Asimismo, destaca el hecho de que no se permite el bloqueo con llave, ya que se inclumplirían las normas de evacuación, y que el cerrojo se puede operar desde cualquiera de los dos lados.