Más de 120.000 canarios se encuentran en riesgo de quedarse sin acceso a cajeros automáticos debido al cierre de oficinas bancarias, que ha supuesto la desaparición de un total de 397 sucursales desde 2008. Según el portal kelisto.es, en los últimos seis años las sucursales en Canarias han descendido un 27,4%, siendo más elevada la cifra en la provincia de Las Palmas de Gran Canaria (30,7%) que en Santa Cruz de Tenerife (23,7%).