La jefa de la diplomacia de la Unión Europea, Catherine Ashton, instó hoy a Rusia a comprometerse con el trabajo de los observadores en Ucrania y aseguró que la UE apoyará las necesidades de Holanda, que trabaja ya en la repatriación de los fallecidos en el derribo del avión de Malaysia Airlines.

"Hoy, lo primero, garantizar que trabajamos junto a Holanda en particular, asegurarnos de que lo que hagamos encaje con sus necesidades para poder solucionar los problemas sobre el terreno inmediatamente", indicó Ashton a su llegada a un Consejo de Ministros de Exteriores de la UE, en el que la situación en Ucrania ocupará una parte central de los debates.

Ashton dijo que la determinación de los ministros, en línea con el Consejo de Seguridad de la ONU, que el domingo pidió la entrada inmediata al lugar y facilidades para llevar a cabo una investigación internacional, es "que haya un acceso adecuado al lugar para que los cuerpos de los familiares y amigos puedan ser devueltos a casa y ser tratados adecuadamente y con respeto".

"Tiene que haber una investigación, la información que llega de diversas fuentes tiene que ser verificada y tenemos que ver las consecuencias de esto", añadió la alta representante comunitaria.

Ashton instó asimismo a Rusia a "hacer su parte" y "asegurarse de que se compromete con los observadores" sobre el terreno.

La política británica señaló que hoy los ministros mantendrán un "debate fuerte" y que instruirán a los embajadores europeos "sobre cómo vamos a avanzar".

Por su parte, el ministro lituano de Exteriores, Linas Linkevicius, aseguró que se ha llegado a un "punto de inflexión no sólo en la situación sino también en nuestra evaluación".

"Hablamos de un acto terrorista", dijo en referencia al derribo del avión de Malaysian Airlines en territorio ucraniano controlado por prorrusos, y apuntó que "hay tareas que preparar, sanciones a finales del mes", en alusión a la ampliación de la lista de sancionados considerados responsables de amenazar la unidad y soberanía de Ucrania, que prepara el Consejo de la UE.

Linkevicius pidió dar el "estatus de terrorista" a los territorios ucranianos de Lugansk y Donetsk, bajo dominio de separatistas prorrusos, así como establecer un embargo de armas.

"Es importante que nos despertemos un poco. Defendernos no sólo de los cohetes sino también de la propaganda que se ha intensificado en los últimos días", dijo, y recordó el flujo de tanques y armamento que ha llegad al este de Ucrania a través de Rusia.

Linkevicius aseguró que la "fase dos" de sanciones, por la que la UE aplica medidas restrictivas a personas y entidades, "aún no está agotada", mientras que la "fase tres", que implicaría sanciones económicas directas a Rusia por no contribuir a reducir la tensión en la crisis ucraniana, "aún no se ha decidido porque tendría un efecto doble", para quien las aplica también, concluyó.

El ministro lituano aseguró que ha llegado "el momento de discutir la situación muy seriamente, de contribuir a una solución", y consideró sobre la posición de Rusia sobre la tragedia que "los hechos deben ser probados. Las declaraciones no son suficientes".