Algunos pescadores ya han comenzado a lanzar sus nasas (arte de pesca) en la zona donde el pasado día 23 de junio, hace apenas un mes, se hundieron las primeras figuras de los enanos, dentro del futuro parque temático submarino de Santa Cruz de La Palma, lo que se está produciendo antes incluso de que los biotopos cumplan con el objetivo de facilitar la creación de vida marina, una situación que ha creado un profundo malestar, por calificarlo de la forma más suave, entre aquellas personas que están trabajando para desarrollar el proyecto.

El objetivo de los pescadores no es otro que capturar a la cada día mayor cantidad de peces que ya se están acercando por curiosidad a los biotopos, ubicados en un "desierto" a 17 metros de profundidad. De continuar con esta actividad pesquera, se evitará que se pueda regenerar la zona al impedir que las figuras de los danzarines de las Fiestas Lustrales cumplan con su objetivo de ser refugio para la flora y fauna. Es decir, se esquilmará el lugar incluso antes de regenerarlo, siempre y cuando no se articulen otras medidas más drásticas para la protección del espacio afectado por esta iniciativa.

El director del proyecto del parque temático, Fernando Sanfiel, reconoció a EL DÍA su "enorme preocupación" por las nasas que han sido lanzadas "muy cerca de donde se encuentran los enanos", una actitud "que de verdad me cuesta calificar". Prefiere pensar que ha sido "por el desconocimiento" de algunos pescadores y que en el futuro "no se volverá a repetir por el bien de todos". A propósito, hizo especial mención a que "informamos a la cofradía de pescadores sobre el proyecto que se está desarrollando, conocen perfectamente lo que hacemos en un lugar donde no había absolutamente nada que capturar y que en un futuro será muy beneficioso para su sector".

Al ser cuestionado por la posibilidad de que la futura plaza de los enanos pueda ocupar un espacio habitual para el lanzamiento de artes de pesca, lo que justifique la acción de los pescadores, Sanfiel fue contundente: "A 17 metros de profundidad, en la zona que ahora ocupan los enanos, nunca se lanzaban las nasas. Las nasas están a mayor profundidad, hablamos incluso de 60 metros", a más de una milla de la costa.

Fernando Sanfiel, que asume con pasión la intención por devolver vida marina a un lugar muerto, dejó claro que los biótopos lanzados al mar "son una fábrica de peces. Hemos puesto en internet vídeos sobre cómo están apareciendo, acercándose a los enanos, peces de diferentes tamaños, pero lo que no se puede hacer es intentar esquilmar la zona". Considera que en uno o, a lo sumo, dos años "los pescadores podrán comprobar los beneficios que el parque subacuático tiene para su negocio". En este sentido, informó de que "con talla juvenil, los peces ya no caben en los biótopos y salen fuera, donde se podrán pescar. Pero vamos a esperar, hay que dar tiempo y no intentar pescar ahora todo lo que aparezca cerca de los enanos".