La idea era un recorrido, como ya se había hecho en Anaga, por la Zona Comercial de La Salud, en concreto una ruta, de arriba a abajo, a través de la principal arteria del barrio alto: la avenida de Venezuela. Sin embargo, los concejales socialistas de Urbanismo, José Ángel Martín, y del Distrito, Alicia Álvarez, recibieron toda clase de quejas, sugerencias y reclamaciones de vecinos y comerciantes.

Durante la ruta, los políticos estuvieron acompañados por el presidente del colectivo, Iván González, quien les presentó en primer lugar al vicepresidente, Jonathan Suárez, propietario de la peluquería Strass Stilistas. Con él, también carnavalero -de Los Rumberos- y diseñador, fue suficiente porque aprovechó para lanzar una "rociada" de críticas bien argumentadas. Alcanzó hasta González con un "desde que subiste de la rotonda para arriba".

Falta de iluminación o aparcamientos, de limpieza, contenedores de basura en la puerta de los comercios, carencia de ornamentos florales (las de la puerta de la tienda estaban completamente secas) y, sobre todo, carencia de actividades de dinamización "para que los vecinos sepan dónde están los comercios y nosotros nos abramos a nuevos clientes".

Martín y Álvarez aguantaron el tipo, dieron la cara y defendieron la posición. El edil de Urbanismo prometió agilizar trámites burocráticos y reducir costes para las iniciativas empresariales. Remitió al distrito Salud-La Salle en lugar de a la Sociedad de Desarrollo, centro de casi todas las críticas. Otra vecina añadió al debe municipal el mal estado del parque de las Indias. Álvarez explicó que "en Ofra centran todo el presupuesto del distrito en el Día del Vecino y aquí lo hacemos de otra manera".

Todo fue más suave en la parte baja de la avenida salvo el encuentro con un señor mayor -la media de edad en la zona una mañana cualquiera es altísima- con dos muletas que desde el otro lado de la calle lanzó su desafío: "Saquen fotos a los jardines que dan pena, no se las hagan ustedes".

Eduardo Medina, director del distrito, hacía un balance positivo de estos tres años, aunque reconoce que "queda mucho por hacer". La segunda y última visita fue el contraste con la anterior. El propietario del centro de belleza Alex Up acaba de trasladarse desde la céntrica calle San Lucas y asegura: "Me va muy bien aquí. Es una buena zona".