Una cadena solidaria ha conseguido hacer realidad el sueño de un grupo de niños de Añaza: aprender a nadar en las cursillos que se imparten cada verano en la piscina municipal Acidalio Lorenzo.

Uno de los críos llora desconsoladamente. Bea, madre, monitora y miembro de la asociación 8 de Marzo, como su compañera Yurena, lo explica: "Es la primera vez que se separa de su madre, el pobre, y hay que entenderlo".

Todo comenzó a las nueve de la mañana. Los miembros de la ONG Ayuda a las Familias Chicharreras habían logrado que dos guaguas de la empresa Mendoza Bus recogieran frente al local social a 26 (13 en cada guagua) de los 35 niños que se habían quedado sin transporte para llevarlos al recinto deportivo capitalino.

Los conductores, Alexis e Iván, estaban contentos por "echar una mano y poder colaborar en una causa tan noble. Es muy fácil hacer felices a estos niños. Se han portado muy bien durante el trayecto".

A las diez menos veinte llegaban los micros a los alrededores de la piscina. En orden, con mucha disciplina, los chicos, de entre cuatro y trece años, seguían las instrucciones de Bea y Yurena: "Vamos, en fila, de dos en dos, todos para dentro". Ya los esperaba Vicente, coordinador de los turnos y horarios de las asociaciones de vecinos, quien hizo un paréntesis en sus vacaciones para atender al grupo de Añaza. Otro eslabón en la cadena solidaria.

Nayara, Hugo, Antonino, Daniel, Mirella... todos son recibidos con mimo y cariño al pie de las corcheras por los "profes del agua". Divididos en dos grupos, los más pequeños por un lado, los de hasta trece años por otro, se colocan los gorros -"no se olviden los gorros"-, solos o con ayuda de los mayores. Ha llegado el gran momento: "Chicos, al agua".

Ayer, durante una hora, los niños de Añaza disfrutaron, como los de otros colectivos vecinales de los barrios, chapoteando entre las instrucciones de los expertos. Hoy volverán, incluso serán algunos más, y lo harán durante 15 días hasta fin de mes. Los niños de Añaza también están ya por fin en la piscina. Como los demás de Santa Cruz.