Policías locales de Candelaria paralizaron el inicio de las fiestas de Las Caletillas la noche del pasado viernes y ayer por la mañana porque los organizadores carecían del obligatorio decreto de autorización que emite el ayuntamiento. El motivo fue que, hasta el último día, un técnico de seguridad, la vicesecretaria y el secretario general del consistorio, Octavio Fernández, emitieron informes negativos a la aprobación de dicho documento. Según algunas fuentes, en la documentación faltaban algunos papeles esenciales para dar el permiso.

Los organizadores, según algunos vecinos, presentaron en los primeros días de este mes la documentación. Hasta el último día la comisión intentó que desde el consistorio se les diera alguna respuesta sobre si podían desarrollar los actos o no. Según unos vecinos consultados ayer, "algunos concejales" verbalmente les dijeron a los organizadores que siguieran adelante, que el texto podría llegarles a última hora. Pero el viernes por la noche aún no había llegado.

Y eso a pesar de que en la página web del consistorio, en una nota de prensa y en las redes sociales se anunció su celebración. Y, aún más, operarios del consistorio instalaron el escenario y efectuaron otros trabajos relacionados con los festejos.

Y la Gala de la Reina empezó. El secretario general de la corporación comprobó que la fiesta había empezado sin autorización y presentó una denuncia formal por tal motivo ante la Policía Local.

Los agentes acudieron a la plaza, identificaron a algunos organizadores y les comunicaron que debían acabar el acto lo antes posible, por lo que se recortó en unas dos horas. La actuación de los agentes y la comisión fue muy discreta y colaboradora, para que el público no se alterara y pudiera provocar altercados graves. Se redujo la actuación del artista que estaba en el escenario, subió el jurado y se eligió a la Reina.

Ayer por la mañana se suspendió un acto infantil con castillos hinchables acuáticos.

La instrucción de las diligencias por la denuncia continuará hasta llegar al Juzgado de Guardia de Güímar, ya que el asunto puede ser calificado como "grave".

Ayer, desde el ayuntamiento se movilizaron a políticos, técnicos y funcionarios para intentar resolver la situación e intentar que la fiesta pudiera reanudarse por la noche. Algunos vecinos comentaron que "nos sentimos mal, porque no hemos actuado de mala fe". Reconocen que "hemos pecado de confiados". Aclaran que desde el ayuntamiento no les avisaron "de anomalía alguna".

Poco antes del cierre de esta edición, el ayuntamiento hizo pública una nota de prensa en la que informó que "las fiestas recuperan la normalidad esta noche (por anoche), después de que no se pudiera tramitar la autorización en la jornada de ayer (viernes) y la existencia de una denuncia provocará que se tuvieran que suspender algunas actividades", sin precisar qué ocurrió con la gala.

El escrito dice que los castillos acuáticos previstos para ayer se suspendieron porque, "según el informe del técnico de Protección Civil, la documentación aportada por la empresa no se correspondía con el espectáculo a desarrollar, no se presenta documentación de los castillos acuáticos, ni certificaciones y ni medidas de seguridad". Un decreto de Alcaldía autorizó el baile de anoche y la fiesta de la espuma de hoy domingo, a las 11 horas.

Alfredo Arencibia: "La fiesta continuará"

El concejal de Fiestas de Candelaria, Alfredo Arencibia, aseguró ayer a mediodía que el Ayuntamiento "está haciendo todo lo que estaba pendiente de corregir, las defiencias no corregidas". El edil candelariero comentó que la comisión de fiestas entregó una documentación en el Ayuntamiento y ayer se solicitaron los papeles que faltaban. El responsable del área de Fiestas de Candelaria se mostró convencido de que "la fiesta continuará".

"No sé lo que ocurrió porque no estaba allí"

Al ser preguntado si sabía cómo ocurrieron los hechos del viernes por la noche en la plaza de Las Caletillas, el concejal Alfredo Arecibia manifestó que "no tengo información, no estaba en el acto". Al igual que confirmaron otras fuentes vecinales consultadas en la jornada de ayer, Arencibia aseguró que "se están haciendo las gestiones pertinentes para resolver las cuestiones que pueden ser el motivo de la suspensión de las fiestas".

El ayuntamiento apostó por la prudencia

Fuentes autorizadas del Ayuntamiento de Candelaria prefirieron ser prudentes y esperar a la resolución de las cuestiones pendientes antes de ofrecer una versión de la situación generada. En un pleno muy reciente, la oposición ya denunció la gestión que se lleva a cabo en el área de Fiestas. En dicha sesión, Alfredo Arencibia reconoció que en el último Baile de Magos hubo "reventa" de mesas (a medida iban quedando libres). Y la oposición criticó que se superó el número de personas aconsejable en el recinto y que se excedió el horario para acabar la mencionada actividad festiva.