El presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, ha recordado al presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, que "Gran Canaria también existe" y ha lamentado el "sectarismo vergonzoso" contra la isla y sus propuestas.

Comentó que "ser de Gran Canaria y tener mayoría del PP parecen ser dos pecados que en la política del Gobierno regional pesan sobremanera y justifican perjudicar a la isla sin reparo alguno". "Eso sí", agregó, "a veces con apoyos interiores de determinados medios e individuos que parecen regocijarse con ese perjuicio injustificado".

Así lo manifestó el presidente insular en una carta al dirigente regional difundida ayer.

Bravo de Laguna recordó que ha planteado diversos temas (capitalidad compartida, ley de sedes...) para recuperar el equilibrio autonómico y que el Ejecutivo canario "no ha resuelto ni una sola en favor de Gran Canaria".

"Me equivoqué y conmigo muchos grancanarios de buena fe, pero igualmente autonomistas de todas las islas, que creen en ese espíritu de equilibrio y solidaridad. A lo largo de estos más de 30 años de autonomía, Gran Canaria ha demostrado ser la más solidaria y la más auténticamente autonomista de todas las islas", aseveró el presidente insular.

Rechazó que a pesar de esto, a la isla se le limite el crecimiento turístico al rechazarse en el Parlamento por primera vez una iniciativa legislativa de un Cabildo, "impidiendo con ello equipararse en plazas hoteleras de 4 estrellas y limitando la creación de empleo".

Además, criticó que no se hace nada por compensar el fraude de los censos erróneos, "donde una isla se beneficia durante años y años de aparentar más habitantes que los reales y no hay ni disculpas pedidas, ni la justa restitución de lo indebidamente percibido".

Asimismo, recordó otros asuntos como que se sigue con el "abultado desequilibrio" en representación externa; se hacen "oídos sordos" al desequilibrio patente en obras hidráulicas o en puertos canarios; se "menosprecia" y rechazan ofertas de prefinanciación a carreteras "imprescindibles" para Gran Canaria; y que se recortan ayudas en emergencias mientras se mantienen en otras islas.

"Y así un larguísimo etcétera que incluye temas tan dolorosos como el desequilibrio patente y sostenido hasta en el tratamiento de enfermos de cáncer (3 aceleradores oncológicos, en la provincia de Las Palmas, 7 en Santa Cruz de Tenerife)", aseveró Bravo.

"En el colmo de la incoherencia política y dejando incluso en ridículo a las dos Universidades Canarias, a otras instituciones y a los más prestigiosos historiadores, funcionarios, juristas y técnicos, el Gobierno ha rechazado la declaración como BIC Histórico y Paisajístico del Oasis de Maspalomas, aunque se ha comprometido a proteger el Palmeral", apostilló.