Una yincana, puzzles, pintaderas guanches y descifrar enigmas vinculados al mundo aborigen fueron las cinco pruebas que superaron los 35 niños y niñas que removieron este domingo el caserío de El Socorro (Güímar) para encontrar el tesoro escondido en la costa.

Esta actividad organizada por la Concejalía de Fiestas y la Asociación de Familias y Mujeres del Medio Rural (Afammer) consistió en que los menores (de 6 a 14 años), en grupos de expedición, tuvieron que superar pruebas y esclarecer las pistas que llevaban al secreto escondido.

La pericia de los cinco equipos de siete niños cada uno permitió que el trofeo saliera pronto a la luz, contando con una animadora profesional, alumnas de los cursos de Animación Sociocultural de Afammer.

La concejala de Fiestas y Juventud, Verónica Jorge, destacó que este evento, "en el que la colaboración de Afammer es inestimable, supone una apuesta por ofrecer una alternativa de ocio saludable para nuestros niños y niñas, en el que la agilidad mental y la perspicacia juegan un papel importante".

No es la primera vez que tiene lugar esta iniciativa vinculada a la fiesta de El Socorro. De hecho, en esta ocasión aprovecharon el trabajo que se desarrolla en los talleres de costumbres y tradiciones que tiene lugar en el Llano de la Ceremonia, uno de los enclaves singulares de dicha fiesta güimarera.