El rechazo de la paralización cautelar de la construcción del dique de San Andrés no les ha hecho desistir. Ángel Lobo, presidente de la Federación Canaria de Surf, informó ayer a EL DÍA de que interpondrán "el recurso contra la resolución del Consejo de Ministros en cuanto a la emergencia de la obra en cuanto se publique dicha resolución". Esto significa que los surfistas recurrirán la decisión estatal por la vía Contencioso-Administrativa, un proceso que se puede dilatar durante años.
Asimismo, Lobo matiza que la resolución emitida por el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales solo rechaza la medida cautelar sin entrar en "el fondo del asunto".
La Federación Canaria de Surf justifica su rechazo a la escollera en San Andrés porque aseguran que "ya demasiado cemento ha enterrado lugares preciosos para la práctica de nuestro deporte transformando ecosistemas valiosísimos para construir playas artificiales o puertos deportivos con un importante impacto visual y medioambiental".
Ángel Lobo se congratula de haber conseguido que "se abra un debate ciudadano sobre el arrecife artificial que en su momento no interesó a las autoridades competentes". "En el caso de que se lleve a cabo la obra", considera, "nacerá bajo sospecha y la ciudadanía estará muy atenta a su impacto visual y la afección sobre el litoral al tapar una salida de barranco que desemboca en San Andrés". Un dique semisumergido que el presidente de la Federación Canaria de Surf define como un "eufemismo inaceptable", puesto se debería llamar "dique emergente de 4 metros de altura".
Los vecinos de San Andrés no comparten la postura de los surfistas y, de hecho, se manifestaron el sábado pasado contra su postura y el recurso interpuesto.
Sin embargo, Ángel Lobo indica que se conformarían con sentarse en una mesa técnica formada por ingenieros, biólogos, oceanógrafos para que se estudie la viabilidad técnica del arrecife artificial. Incluso, recalca que "si de esa mesa sale que es inviable (su propuesta), al momento retiraremos todos los recursos". Cree que si se comparasen los dos proyectos, los surfistas tienen todas las de ganar porque su plan tiene "cero impacto visual" e incluso, "supondrá un reclamo publicitario muy importante para el barrio de San Andrés y ayudará a la diversificación económica de la zona".
El presidente de la Federación Canaria de Surf reconoce que no se hace surf en San Andrés, pero continúa defendiendo el proyecto de arrecife natural.
Lobo recuerda que "hace más de dos años, cuando ni si quiera se estaba tramitando el proyecto", se reunieron con técnicos de la Autoridad Portuaria para ofrecerles su proyecto alternativo. Apostilla que el ayuntamiento lo conoce "desde hace más de tres años". También realizaron alegaciones este año. "No somos unos advenedizos que acabamos de llegar", concluye.
"El alcalde propugna una ciudad abierta al mar, pero su primera acción consiste en encerrar el litoral chicharrero"
La Federación Canaria de Surf no solo va a seguir adelante con su recurso, sino que acusa al alcalde de Santa Cruz de Tenerife de "urgencia política". "El alcalde propugna una ciudad abierta al mar, pero su primera acción consiste en encerrar el litoral chicharrero tras un muro de 4 metros de alto y 350 metros de largo, lo que resulta, cuanto menos, incoherente", expuso Ángel Lobo. El presidente de la Federación Canaria de Surf explicó que Bermúdez conoce la alternativa del arrecife, "pero se escuda diciendo que ningún técnico le ha propuesto esta alternativa". "Es evidente que o la urgencia política manda (y se equivoca pues no va a arrastrar votos por ahí) o el más alto dirigente chicharrero prefiere los muros de cuatro metros a los arrecifes sumergidos sin impacto visual".