La Universidad de La Laguna (ULL) cuenta desde este viernes con un nuevo edificio que acogerá los estudios impartidos por la Sección de Bellas Artes de la Facultad de Humanidades, tras haber sido inaugurado en un acto presidido por el rector de la institución, Eduardo Doménech, y el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero.

El nuevo edificio comenzará a acoger las clases teóricas de las tres titulaciones de grado que imparte el día 15 de septiembre, y las prácticas, el día 22, informa la ULL.

Previamente, el día 10 de septiembre, fecha en la que comienzan las clases en el resto de centros de la ULL, se organizará una jornada de bienvenida para el alumnado de nuevo acceso al centro, mientras que al día siguiente se realizará una actividad similar, aunque dirigida a los estudiantes que ya estaban matriculados en cursos anteriores.

El leve retraso en el inicio de las clases se debe a que aún resta por terminar la mudanza de algunas de las aulas desde el edificio antiguo al nuevo.

ACTO INAUGURAL

La inauguración de la nueva sección de Bellas Artes reunió a más de un centenar de personas, entre representares de diversas instituciones civiles, militares y religiosas y de la propia universidad. Durante el acto, el rector de la ULL repasó todas las vicisitudes que provocaron la dilación en la construcción de un edificio que fue proyectado en 2003 y que, sin embargo, no ha podido entrar en funcionamiento hasta 2014.

Doménech valoró el trabajo del equipo de arquitectura gyp por haber plasmado en un proyecto las necesidades no sólo prácticas de unos estudios con unas peculiaridades tan específicas como son las artísticas, sino también por crear un nuevo icono arquitectónico de la isla de Tenerife.

"El edificio está pensado para que en un futuro a medio plazo pueda acoger exposiciones y actos culturales de toda clase. Queremos que sea una nueva puerta de acceso para que la sociedad pueda acercarse más y mejor a la universidad", indicó.

Por su parte, Rivero alabó igualmente la nueva construcción, la cual denominó "la espiral de Bellas Artes", apodo con el que ya empieza a ser reconocida.

Indicó que gracias a esta infraestructura, la ULL es una de las pocas universidades españolas que pueden impartir todas las titulaciones incluidas en el Libro Blanco de Bellas Artes, lo cual calificó una muestra más del compromiso de su Gobierno por propiciar la "igualdad de oportunidades" a los canarios.