La queja pública que realizó Álvaro Cervera en la rueda de prensa del pasado viernes en relación a la Copa del Rey tiene base. Se quejaba el entrenador del Tenerife de la facilidad con la que el bombo de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) coloca como visitantes a los representantes canarios en la competición. En el caso blanquiazul, hay que remontarse hasta 2008 para encontrar la última eliminatoria a partido único disputada en el Heliodoro Rodríguez López. Fue ante el Córdoba y se saldó con la clasificación de los insulares al ganar por dos tantos a uno.

Desde entonces, en cinco ocasiones consecutivas el sorteo ha obligado al Tenerife a jugarse su continuidad en la competición del KO fuera de casa. Elche (dos veces), Cerceda, Alcoyano y Eibar se convirtieron en verdugos aprovechando que el choque se jugaba en su estadio. Esta temporada se repitió el guion. En esta ocasión ha sido en Girona y Cervera estalló el viernes. "Es más fácil mandarnos a nosotros fuera y no creo que haya sido un sorteo que haya salido así", se quejó antes de adelantar lo que sucedería si lograran eliminar al conjunto catalán: " Si pasamos la eliminatoria de Copa nos van a mandar fuera otra vez, pero nosotros queremos pasar. Nos ponen siempre con un rival de nuestra categoría, en su campo, pues parece que no quieren que estemos".

Puede ser casualidad. Pero, desde luego, no lo parece. Aparte del Tenerife lo sufren otros equipos canarios. Tanto que, en las últimas cinco ediciones de la Copa, solo tres de las 21 eliminatorias a partido único de los equipos canarios se han disputado en las Islas. Esa suerte la tuvo el Universidad de Las Palmas en 2010 en la primera ronda. Eliminó al Leganés (1-0) y luego tuvo que enfrentarse a Caudal y Lucena a domicilio el mismo año.

A Las Palmas ha disfrutado de la posibilidad de jugar como local hasta en dos ocasiones. Tras eliminar al Xerez, le visitó el Racing de Santander en el curso 12-13. Al año siguiente, repitió fórmula. Primero tuvo que dejar fuera al Sabadell en territorio catalán y luego jugó en el Estadio de Gran Canaria ante el Hércules.

A los últimos campeones canarios de Tercera División tampoco les ha sonreido esa fortuna. Cayeron siempre a la primera de cambio y lo hicieron fuera de casa. Es el caso de Corralejo, Lanzarote, Marino y Granadilla. Badajoz, Eibar, Caudal y Leganés se beneficiaron de un sorteo que, teóricamente, se desarrolla por proximidad geográfica.

En el presente ejercicio, el Granadilla repitió. Esta vez ante el Izarra. Aparte de la visita del Tenerife a Girona, también le tocará viajar a Las Palmas (Mallorca). Si la RFEF quiere a los canarios en la Copa, lo disimula bien.

La última vez, en casa

Para el Tenerife sucedió en la temporada 09-10, aunque se trataba de una eliminatoria a doble partido. Su condición de Primera le permitió enfrentarse al Celta (entonces en Segunda) jugando la ida en Vigo. Aún así, cayó eliminado.

Fuera nunca ha ganado

En todas las eliminatorias que ha disputado a partido único fuera de casa, se ha dado el mismo resultado: derrota del Tenerife. Es una de las estadísticas que le persigue desde la instauración de este modelo. Incluso, cuando se probó con anterioridad (a mediados de la década de los 80). En sus últimos tres partidos ni siquiera marcó.