El esclavo mayor del Santísimo Cristo de La Laguna, Carlos Pérez-Godiño, descartó ayer llegar a un acuerdo para que las mujeres puedan pasar a formar parte de la hermandad que preside y evitar así que el caso acabe en los tribunales.

"Igual que hay cofradías solo de mujeres, las hay también solo de hombres, como la Hermandad de La Sangre", subrayó el esclavo mayor, tras finalizar el acto del descendimiento del Santísimo Cristo de La Laguna.

Pérez-Godiño, cuyo mandato al frente de la Esclavitud del Cristo acaba en diciembre tras dos años, indicó que "cada uno es libre" de opinar lo que quiera. "Las leyes están ahí; están los jueces para aplicarlas y nosotros para acatarlas", sentenció.

Como se recordará, Teresa Laborda, una de las mujeres que, desde hace años, pretende formar parte de la citada hermandad, aseguró este martes que llevarán ante los tribunales eclesiástico e, incluso, civil, los estatutos de la Esclavitud, que no permiten la entrada al colectivo sino a "caballeros".

Además, advirtió de que harán llegar la noticia "a donde haga falta, incluso al papa", que representa la nueva imagen de la Iglesia.

Teresa Laborda recordó que han sido varias las veces que han solicitado tanto a la Esclavitud del Cristo como al propio Obispado de Tenerife la posibilidad de que las mujeres puedan formar parte de esta hermandad sin que haya habido respuesta oficial alguna.

Por otro lado, Carlos Pérez-Godiño justificó la baja participación de esclavos durante el acto del descendimiento de ayer -había en torno a 50 cuando la esclavitud la forman más de 1.500- al ser un día laborable. No obstante, aseveró que esta ha sido "una lucha" suya desde que ocupa el cargo. "Yo no puedo obligar a nadie a que participe", afirmó el esclavo mayor, quien reconoció que, a veces, se puede pensar que "tienen razón" los que piensan que algunos esclavos acuden a determinados actos para figurar.