Los agentes del Grupo Operativo de la Policía Local y la Unipol que acudieron en el mediodía de ayer al número 37 de la avenida Venezuela, en Santa Cruz de Tenerife, lo hicieron alertados por un supuesto caso de violencia de género, pero se encontraron algo bien distinto. En la vivienda los recibió un hombre que había sufrido lesiones de arma blanca en una mano y una pierna en lo que, según fuentes consultadas, había sido una reyerta vinculada con el tráfico de drogas.

El hombre, de nacionalidad colombiana y de entre 25 y 30 años, se dedicaba presuntamente a la venta de estupefacientes a pequeña escala, por lo que ya le ha sido imputado un delito de tenencia y tráfico de drogas. En cuanto a los agresores -dos varones-, al cierre de esta edición estaban aún en paradero desconocido y eran buscados por las fuerzas de seguridad.

Los efectivos policiales hallaron hachís, así como diverso material utilizado para la comercialización de esta sustancia, como una báscula de precisión. Entre los objetos intervenidos figura, además, una pistola simulada, esposas, una katana y dinero fraccionado.

Debido a la gravedad de los hechos y a la concurrencia de varios delitos, las diligencias han sido asumidas por el Grupo de Investigación de la Policía Judicial (Cuerpo Nacional de Policía). Las primeras hipótesis apuntan a un ajuste de cuentas relacionado con el tráfico de estupefacientes.

Al agredido -y único arrestado por el momento en el caso- le constan detenciones anteriores por delitos contra la salud pública. El hombre fue trasladado al Hospital Universitario Nuestra Señora de la Candelaria, donde fue operado ayer.