Desde la tarde-noche del viernes Coalición Canaria busca candidato a la Alcaldía de La Laguna. Aunque para muchos la de Fernando Clavijo era una victoria anunciada, la corroboración de los hechos no ha hecho más que acelerar un proceso, por otra parte, natural. La ruleta nacionalista ha empezado a girar. Durante los últimos meses, desde que la candidatura de Clavijo pasó de ser una simple idea a hacerse una realidad, los nombres de los hipotéticos sustitutos no han dejado de sonar. Sobre todo dos de ellos, José Alberto Díaz y Ricardo Melchior.

Como en todo proceso de este tipo, ambos tienen defensores y detractores. Sus ventajas e inconvenientes. Y también como en todo proceso de estas características, hay uno que parte con cierta ventaja. El ahora concejal de Seguridad Ciudadana y también secretario general de CC en La Laguna, José Alberto Díaz, reúne gran parte de los requisitos que, durante los últimos dos años, ha venido defendiendo, precisamente, el ahora aspirante a la Presidencia regional, Fernando Clavijo.

Cualidades sobre las que el también secretario general de los nacionalistas de Tenerife ha basado gran parte de su argumentario, interno y externo, para acabar venciendo en su carrera por la Presidencia al hasta ahora todopoderoso Paulino Rivero.

José Alberto Díaz es una cara nueva, aunque con experiencia y formación (es abogado), por tanto encaja en el perfil de renovación del que ha intentado impregnar Clavijo el partido en Tenerife desde que se hizo con las riendas en julio de 2012. En definitiva, es el que más se acerca a la idea sobre la que ha girado su discurso.

Claro que la de Díaz no deja de ser una apuesta arriesgada. Y así lo reconocen incluso sus compañeros de oposición en La Laguna. ¿Por qué? Porque su téorico rival atesora lo que a él le falta: el conocimiento ciudadano. A Ricardo Melchior le sobra imagen. Esa batalla la tiene ganada de calle. Pero también le sobran años para lo que pretende vender Coalición.

Por eso la de Melchior (al que muchos verían como una alternativa de seguridad) no deja de ser también una jugada de riesgo. Iría en contra de los principios que se han defendido hasta ahora. Pero política es política.

En las próximas dos semanas, y dado que la plaza de La Laguna es fundamental para los intereses de CC, el debate sobre el candidato recibirá un acelerón. Aunque, ni de lejos, se parecerá al superado ya entre Rivero y Clavijo.

Un alcalde fugaz

Si completa su mandato, en 2015, Fernando Clavijo habrá sido alcalde de La Laguna durante siete años. Tras su toma de posesión, en noviembre de 2008, tras la renuncia de Ana Oramas, Clavijo volvió a convertirse en alcalde en 2011 en virtud de un pacto que firmó con el PSOE. Había perdido la mayoría absoluta heredada. Su salto a la Presidencia regional deja, en parte, huérfana una plaza tan importante para CC como ha sido La Laguna. Muchos habían visto en él como un alcalde de futuro, con proyección. Por eso, desde ayer circula el rumor de que, a pesar de sus años en la Alcaldía, Clavijo ha sido un alcalde fugaz.