El Cabildo de Tenerife, a través del área de Medio Ambiente, y Mirlo Positive Nature han puesto en marcha la segunda campaña de reforestación de la Corona Forestal, una iniciativa con la que pretenden plantar unos 500 árboles en una superficie aproximada de 4.200 metros cuadrados y gracias a la aportación de los ciudadanos.

El proyecto se financia así como en la primera edición, mediante un original sistema de participación ciudadana, que permite plantar un árbol por cada 8 euros recaudados. La campaña se encuentra abierta y finaliza el 24 de octubre. Las personas interesadas pueden obtener más información en la web mirlo.co.

La iniciativa fue presentada este miércoles por la consejera de Medio Ambiente, Ana Lupe Mora, y el director general de Mirlo Positive Nature, Yeray Martínez.

En palabras de Ana Lupe Mora, "se trata de una iniciativa en la que queremos implicar a la ciudadanía para la conservación de un espacio tan importante como la Corona Forestal, que es el mayor espacio natural protegido de Canarias".

En su opinión, "es una actividad de participación ciudadana que al mismo tiempo nos ayuda mejorar los espacios naturales de la isla, uno de los atractivos turísticos más importantes con los que contamos". De hecho, dijo que el año pasado empezó con la plantación de árboles en unos 3.500 metros cuadrados y este año se quiere repoblar con monteverde una zona de unos 4.200 metros cuadrados.

Por su parte, Yeray Martínez indicó que se busca la participación de personas "comprometidas con la generación de huella ecológica positiva". "Queremos conseguir unos 130 mirlos, que son las personas que, imitando el comportamiento del mirlo capiblanco, contribuirán a mejorar la Corona Forestal, estamos abiertos a que participen todos los ciudadanos que quieran", aseguró.

Yeray Martínez agradeció la colaboración del Cabildo y del personal de Medio Ambiente, que cede los terrenos para la reforestación y presta asesoramiento técnico adecuado. "Queremos repetir el éxito obtenido el año pasado y seguir contribuyendo a la mejora del medio ambiente de nuestra isla", afirmó.

HUELLA ECOLÓGICA POSITIVA

La campaña Corona Forestal 2014 pretende recaudar 4.000 euros, que serán suscritos íntegramente por la ciudadanía, comprometido con la generación de huella ecológica positiva, conocidas como mirlos.

La repoblación forestal tendrá lugar en una zona propia del bosque de laurisilva, también conocido como monteverde. El mirlo capiblanco es un ave que vuela anualmente del norte de Europa a las Islas Canarias y, una vez allí, ayuda a dispersar las semillas del cedro canario, una especie endémica amenazada.

Los mirlos que llegan de Europa se alimentan de sus frutos, que solo pueden germinar después de que el mirlo los haya digerido. Así, se produce una simbiosis que refleja lo que la campaña de los 130 mirlos pretende conseguir.

El proyecto para la regeneración de la Corona Forestal se inició en 2013 con la plantación de 3.500 metros cuadrados de bosque y un total de 520 árboles.

Gracias a estos nuevos árboles, se impide que 139 toneladas del CO2 generadas por la actividad humana fluyan a la atmósfera y contribuyan aún más al calentamiento del planeta.

Las 139 toneladas de CO2 equivalen a la huella de carbono media anual de 25 ciudadanos, las emisiones de unos 50 coches a lo largo de un año o más de 200 vuelos entre Canarias y la Península.

La empresa Mirlo tiene previsto revisar los árboles plantados para reponer, a la llegada de las lluvias otoñales, aquellas plantas que no se encuentren en buen estado. No obstante, el año ha sido especialmente bueno y se espera que el éxito de arraigo supere el 90%.

Además, a los árboles plantados con las aportaciones de los clientes de Mirlo, se une una pequeña plantación de 30 árboles que se realizó asimismo en noviembre de 2013 con los clientes del Hotel Tigaiga, del Puerto de la Cruz.

La iniciativa de Mirlo Positivo Nature y del Cabildo de Tenerife plantará en sucesivas campañas otoñales pino canario y otras especies como el cedro o la laurisilva en los bosques naturales de la Corona Forestal, ahora ocupados por especies foráneas, así como recuperará las áreas ya deforestadas del espacio natural protegido.