Tiene la estrategia tan clara que se enroca en sus premisas: no hablar de otras candidaturas aunque, por supuesto, con sus mensajes no para de dejar caer comparaciones o insinuaciones, con lo que muchos podrían concluir que está molesto. Él lo niega e insiste en que su proyecto para el PSOE canario es independiente, "no responde ni al aparato ni a una plataforma de alcaldes" y aspira a la Presidencia, no a la Vicepresidencia. Se desvela aquí el Gustavo Matos más aguerrido y defensor de un cambio en el que trabaja desde hace un año y medio con el que quiere liderar la "reinvención que necesitan las Islas para los próximos 20 años".

Parecía que se enfrentaría solo a José Miguel Pérez y, ahora, ya hay otras tres candidaturas y sin él: ¿sorprendido?

Lo importante es que el PSOE y Canarias sepan que mi candidatura no aspira a la Vicepresidencia, sino a la Presidencia. Queremos recuperar para el PSOE una mayoría social, que ya tuvimos en 2007, cuando fuimos los más votados y obtuvimos 26 diputados. En 2011, logramos 15 y parece que no terminamos de recuperar espacio político. Por eso, quiero salir a ganar, no a empatar, pues así solo se acaba perdiendo.

¿El resto de candidatas son perdedoras?

No hago declaraciones sobre otras candidaturas. Mi proyecto surge hace mucho tiempo y solo queremos recuperar una mayoría social para una opción progresista.

De acuerdo, pero ningún signo es neutro: al decir lo de la Presidencia deja caer que las otras aceptarían un papel secundario...

No dejo caer nada, del resto de candidatos no opino. Son compañeros leales y valientes al dar un paso adelante y creer que no hay que quedarse de espectador.

¿Esperaba la retirada de Pérez o lo sorprendió?

Ni la esperaba ni me sorprendió. No dedico tiempo a eso, sino a nuestro proyecto, articulado en toda Canarias. He sido el único que ha presentado su opción en otras islas y no es un planteamiento de una isla contra otra, ni de menores contra capitalinas, pues los problemas de la gente sencilla son los mismos en El Hierro y Lanzarote.

¿No le parece contradictorio que a Patricia Hernández, que apoyó a Madina, la respalden alcaldes del Sur de Tenerife que apostaron por Sánchez, como usted?

Insisto en que no hablo de eso. No son primarias a la Secretaría, sino a la Presidencia. Hay que hablar de los problemas de los canarios. Son preguntas para otros. Mi proyecto se fundamenta en haber recorrido Canarias muchas veces, hablando con mucha gente y recogiendo las ganas de cambio.

Pero no puede negar que estas candidaturas cruzadas sorprenden, ¿son antiMatos?

No lo valoro. Mi candidatura no esperó a ver qué pasaba en CC ni qué decía el PP. Nuestro proyecto tiene un recorrido desde hace un año y medio y no está condicionado a otros. Queremos hablar de lo que debe ser Canarias en 20 años y nos marcamos que sea el PSOE el que lidere ese cambio de época.

¿No pactará con nadie?

Me hace más preguntas sobre las otras candidaturas que sobre la mía. Cuando se conozcan los otros proyectos, a lo mejor hay posibilidades de acuerdo, pues son compañeros. Pero nunca como intercambio de cromos, sino de ideas.

¿Qué le han dicho en Madrid?

Voy mucho y tengo una gran relación con Pedro Sánchez, pero esto no tiene nada que ver. Hemos trabajado mucho y lo importante es qué decidirán los militantes.

¿Convencido de que ganará?

Lo importante es trabajar. Viviremos el proceso, nuestro proyecto no es contra nadie, ni de reacción a nada. Tampoco hay muchos secretos para recuperar el espacio: la política ha de hacerse de abajo a arriba, y ese es nuestro proyecto. No hay detrás una plataforma de alcaldes ni está el aparato, sino militantes de todas las Islas.

¿A quién destaca de su equipo?

Es un proyecto muy colectivo y participativo, no destacaría a nadie. La época de los liderazgos personales ha terminado, esto es horizontal con un liderazgo colectivo.

Resulta imposible desligar sus palabras de las comparaciones...

No, creo que es evidente que no somos la candidatura de ningún aparato regional o insular y tampoco ha surgido por unos alcaldes.

¿Le están intentando boicotear?

No. Ni mucho menos. He apostado por las primarias desde el principio, cuando a otros no les parecían bien. Creo perfecto que haya 4 candidaturas, no sería sano que no hubiera ninguna o que esto se arreglase como antes: en una cena particular de 4. Nuestro proyecto es de bases, que es la mayoría del PSOE. Hemos tratado de traer el cambio que ha supuesto el 15M. El resto de candidaturas me parecen razonables y respetables. Creo que tenemos el respaldo de buena parte de los militantes, que son los que decidan.

Si gana, ¿integrará a otras candidaturas?

Hablar de eso no es sano ahora. Los ciudadanos desean saber qué queremos sobre energía, educación, lo social, la sanidad, los problemas de la gente normal, de los que necesitan que el PSOE no sea minoritario ni la marca blanca de otro partido, sino un proyecto de izquierdas claro. No quieren oír nada de pre o postpactos.

De perder, ¿dónde se ve?

Como comprenderá, esa posibilidad no la contemplo.

Si gana, se enfrentará a Clavijo: ¿un déjà vu, complejos, miedo?

¿Y por qué no él conmigo? De todos modos, el PSOE no se enfrenta a CC. Llevarlo ahí empobrece. No tenemos que salir a vencer a nadie, sino a ganarnos la confianza ciudadana. Para ser mayoritarios, no debemos mirar a otros, eso es de partidos pequeños y yo quiero que esa pregunta se la hagan a CC.

Oramas dice que, por el petróleo, lo lógico es un pacto CC-PSOE...

No hablo de pactos; es una falta de respeto al ciudadano. Canarias debe ser reinventada y cambiar su modelo social, económico, educativo, cultural... Hemos de crear una sociedad nueva entre todos. Hablar de la asistencia social, la universidad, el agua, la sostenibilidad, la conexión con Europa... Hemos de abandonar el discurso victimista, tratar de ser una comunidad de primer nivel, más allá de la lejanía, y presentarnos ante España y Europa como una oportunidad, no como problema. El PSC se ha contagiado de ese victimismo.

¿Habrá debates en esta pugna?

Ya los he pedido. Es más, creo que debía haberlos antes de la entrega de avales, algo que yo eliminaría, pues es contradictorio con que puedan votar los ciudadanos. Así es más complicado para los que tenemos menos arraigo en los aparatos. Pero bueno, así está, hay que pasar ese corte y ya se cambiará.

¿Duda de que los conseguirá...?

Hay que ser humildes y pedírselo así a los militantes.

¿En qué se diferencia la Canarias que quiere de la de CC o PP?

Lo principal es la regeneración política, limitando mandatos, por ejemplo. El Parlamento no puede ser un museo alejado del ciudadano, hay que propiciar la participación en las comisiones y modificar la Ley de Iniciativa Popular para que se use más. El PSOE debe liderarlo con otros partidos, colectivos... También debemos tomarnos en serio los servicios sociales, hay miles de familias que no tienen ayudas y planteo una paga social, aunque el PP parece que la va a rechazar. Se ha de instaurar una renta básica de ciudadanía. Para 2025, Canarias ha de tener más del 50% de su energía limpia. Para ello, propongo un régimen específico de retribución de renovables financiado por la UE.

¿En educación y sanidad?

En educación es donde más se nota la gestión del PSOE, pero Canarias debe liderar la revolución del libro de texto digital. En sanidad, se ha de garantizar que sea pública y de calidad, y acabar cuanto antes los hospitales. Y creo también que el PSC debe recuperar su vínculo con la cultura, la intelectualidad, la investigación y las vanguardias.