El Tenerife tuvo una visita inesperada en la práctica que realizó ayer por la mañana en El Mundialito. Una amplia representación de la peña más numerosa del club, Frente Blanquiazul, se acercó a las instalaciones de Ofra con el intención de empezar a animar a los jugadores dos días antes del clásico.

Los aficionados no se limitaron a presenciar los ejercicios: colocaron una pancarta en un lateral del campo - "Un escudo, una Isla, un sentimiento. Vamos a por ellos"-, entonaron cánticos e incluso encendieron bengalas.

"Una afición que esté al lado de su equipo es lo mejor que se puede ver, pero son 42 partidos. Que pase así de repente sorprende más que otra cosa, pero claro que es agradable", manifestó Álvaro Cervera. Por su parte, los futbolistas compartieron unos minutos con los seguidores antes de entrar en la ducha. Mañana les espera más.