Cuatro hermanas cuyos padres murieron en el accidente de avión de Spanair que se estrelló en Madrid en agosto de 2008 y en el que fallecieron otras 152 personas reclamaron ayer, en el primer juicio de lo Mercantil que se celebra por esta causa, que la compañía Mapfre las indemnice con 18,3 millones de euros. Su abogado, Antonio Marrero, dijo al tribunal que es una catástrofe que ha provocado un auténtico "calvario" a esta familia, que aún sufre sus consecuencias.

El juicio quedó visto para sentencia.