A la delicada situación con la que el Tenerife llegará mañana a El Sadar y a la posibilidad de que Álvaro Cervera pierda su cargo si el equipo blanquiazul pierde ante el Osasuna, se unió esta semana el asunto de las declaraciones de Cristian García, en las que el delantero opinó que otra manera de jugar y la apuesta por alineaciones sin tantos cambios de una jornada a otra, podrían ser más productivas. De todo esto y de más cosas habló el técnico ayer en rueda de prensa. Empezó refiriéndose a la lista de convocados y, en concreto, a la ausencia del "Ruso". El entrenador no tuvo ningún problema en exponer los motivos de su decisión y no descartó que el futbolista procedente de Godoy Cruz vuelva a ganarse su confianza.

Aridane no viaja. ¿Al final no se recuperó de sus molestias?

Entrenó (ayer) por primera vez y estaba mejor. A lo mejor podíamos correr el riesgo de que jugara, pero no me gusta que los jugadores participen en los partidos si no han entrenado durante la semana.

¿Por qué no convocó a Cristian?

Él dijo públicamente que no está de acuerdo con la mayoría de las cosas que se hacen. Normalmente, en cualquier grupo, ya sea deportivo o empresarial, si pasa eso, difícilmente puedes formar parte de lo que vas a hacer luego. Es mi sensación. Difícilmente te puede echar una mano si no le gusta cómo juega ni quiénes juegan, y encima lo hace público, en vez de hacerlo en privado. Simplemente, es una decisión, porque creo que poco podré sacar de un jugador con ese pensamiento.

¿Le sorprendió que lo dijera?

Cuando llevas tanto tiempo en el fútbol, te sorprenden pocas cosas. Es mi tercer año aquí y en ese tiempo he hablado en privado con muchos jugadores sobre cosas particulares y globales, pero nunca tuvimos un problema y siempre llegamos a entendimientos. Pero hacerlo público y de esa manera, sí me sorprendió un poco. Hacía tiempo que no lo veía. Pero sé que forma parte de algunas estrategias o de formas de hacer de personas que quieren hacer así las cosas.

¿Una estrategia?

No. No dije que forme parte de una estrategia. Quiero decir que cuando alguien hace unas declaraciones, lo hace porque quiere que se le escuche. Pero otros lo hacen porque están un poco cansados de su situación; y también los hay que las hacen como una forma de estrategia, pero no digo que este caso sea así. Estas cosas pasan y las he vivido. Pero en el tiempo que llevo aquí, nunca me ocurrió igual. De todas formas, no es una situación personal. Más bien, él habló del grupo, y es lo que influye en la toma de decisiones, porque el grupo está por encima de todo.

¿Se siente traicionado?

Los entrenadores somos personas especiales por el hecho de que estamos expuestos y trabajamos con mucha gente, y cada uno es libre de decir lo que piensa. Si hay algo positivo en todo esto, es que él se expresó con libertad. Pero, normalmente, debes hablar con la persona que te tiene que escuchar y buscar una solución. ¿Traicionado? No. Él creyó conveniente que lo tenía que hacer así y lo hizo así.

¿Cristian le pidió disculpas?

Habló conmigo.

¿Eso le sirve de algo?

Habló conmigo...

¿Seguirá sin contar con él a partir de ahora?

No lo sé. De verdad.

¿La situación es irreversible?

Cuando una persona está a gusto donde está, con la forma de jugar o con quien juega... Si algún día está a gusto y se le ve y dice que quiere formar parte de esto, no habrá ningún problema con que juegue. Pero si sigue así, es tirarte piedras contra tu propio tejado con una persona que no quiere estar. Si me lo dice a mí, seguramente llegaremos a un entendimiento e incluso haremos un esfuerzo por buscar una solución. Pero si lo hace públicamente, me parece que es otra cosa y no buscar una solución.

¿Lo que dijo Cristian le hace plantearse algunas cosas sobre la manera de jugar del Tenerife?

Con este estilo subimos y con este estilo nos mantuvimos. Creo que con eso ya he contestado. Tendrán que cambiar las personas que vienen a este grupo, que no es nuevo, está formado desde hace un tiempo. ¿Que puede ser que sea peor de lo que he demostrado porque no sé cambiar? Muy bien. Si cambiara, me podrían preguntar por qué estoy dando tantos tumbos o no tengo las ideas claras. Tengo unas ideas y, dentro de ellas, he cambiado muchas veces de forma de jugar. Es en lo que creo. Pero no voy a cambiar porque alguien diga, públicamente, que no está de acuerdo conmigo. Si en un momento dado, que no es el caso ni lo he vivido nunca, unos futbolistas me dicen que creen que con otra manera de jugar vamos a sacar más rendimiento, me lo podría plantear. Pero eso no me ha pasado nunca, y aquí, en el Tenerife, muchísimo menos.

¿Se ha cuestionado si algunos de los fichajes del pasado verano no se ajustan a su modelo?

Todos los jugadores se ajustan a todas las ideas. Cuando se ficha a un futbolista, piensas que cabe en un organigrama, máxime cuando es muy específico. Por ejemplo, "Ruso" solo juega en una posición, es delantero centro, y la mayoría de equipos juegan con un futbolista de ese estilo. Otra cosa es que tengas a dos mediocentros defensivos y fiches a un tercero.

¿Sospecha que hay más jugadores que piensan como Cristian?

No lo sé. Nadie me lo ha dicho. En un vestuario con veinticinco jugadores puede haber veinticinco maneras de jugar, y los entrenadores están para que se juegue de una sola forma, acertada o equivocadamente. Cuando aciertan, están, y cuando se equivocan, probablemente los echan. Pero no podemos ponernos a pensar de qué forma quieren jugar todos. Seguramente, la que quiere "Ruso" no es la misma de Suso o de Cámara.

¿Cómo están los jugadores?

Al final de la semana, más alegres y viviendo más como ellos. Al principio estuvimos todos sorprendidos por lo que había pasado.

¿Eso que pasó les sirvió para unirse más? ¿Tuvo algún efecto?

Nosotros nunca estuvimos desunidos, aunque luego aparezca alguien por ahí estando en desacuerdo. Pero en un grupo siempre hay alguien en desacuerdo, y eso es bueno porque te da diversidad, más allá de que luego lo haga público o no. Si recibo cosas diferentes, son positivas por el intento de animarme por lo que pasó el otro día. No suelo trabajar mucho lo de la unión. Eso se hace al principio, cuando llegas; lo consigues y dejas que siga su curso.

¿Qué puede contar de la reunión que tuvo con los capitanes?

Es que no me gusta contar las cosas que hago en privado. Vinieron a hablar conmigo, pero no tocamos lo deportivo para nada, solo fue por un tema personal.

Sin Aridane ni Cristian, ¿qué jugador ocupará el puesto de delantero? ¿Ifrán está en condiciones de disputar todo el partido?

Si digo que no, seguramente él pensará que sí. Lo cierto es que cuando se lesionó, estaba llegando a su punto bueno, pero tuvo ese inconveniente y ha estado dos meses parado. Físicamente no estará al nivel de los demás, ni de los nuestros ni de los contrarios. Pero creemos que, seguramente, tal como estamos y cómo va entrenando él, si le damos minutos, avanzaremos mucho más. Está recuperado y cuando hacemos cosas en campos de dimensiones reducidas, no tiene ningún problema, pero en un campo grande y contra un rival competitivo, seguramente notará que todavía no está.

¿Será titular?

Sí, puede ser.

¿El juego ofensivo del Tenerife en El Sadar cambiará mucho por no tener al delantero alto?

A la hora de disputar una pelota presionada, siempre buscamos a Aridane, que toca el balón por arriba y le da continuidad al juego. Al no contar con él, tendremos que ser más precisos. Intentaremos que no nos afecte y que el juego sea más fluido. Este es un recurso que no podremos utilizar esta vez.

¿Cuál es el plan para El Sadar?

Pasa por mejorar nosotros un poquito y que ellos no mejoren; es decir, tenemos que subir el nivel a la hora de marcar goles. Parece que estoy cambiando el discurso, pero nos marcan dos goles en cada partido y el primero, muy pronto. Ese es el problema, porque siempre vamos a remolque. Luego, este Osasuna es diferente al Osasuna que recordamos, porque marca muchos goles y también recibe bastantes. A ver si podemos aprovechar eso. Pero el Osasuna tiene un muy buen equipo y estoy seguro de que encontrará el equilibrio.

¿Qué le preocupa del rival? ¿Quizás la presencia de Nino?

Sí, claro. Alguien como él, acostumbrado a meter goles y que vive para eso y de eso, no falla cuando le llega una pelota en el área.

El partido es comparable con una final. ¿Lo puede ser incluso para el entrenador en su puesto?

No lo sé. Los entrenadores somos trabajadores que dependemos de los resultados y no del trabajo ni de lo que hayamos hecho o podamos hacer. Dependemos siempre del momento, y la situación del Tenerife, conmigo de entrenador, no es buena. Entonces, puede pasar cualquier cosa.

¿Es su momento más difícil desde que está en el Tenerife?

No es el más difícil, pero sí es el más desagradable.

¿Sueña con un triunfo que acabe con el ambiente enrarecido que hay en torno al equipo y a usted? ¿Eso lo cambiará todo?

Conmigo, no. Con el equipo, creo que sí. Los futbolistas jugarían con una calma que es necesaria. Pero conmigo no va a cambiar nada.

Entonces, ¿si gana el Tenerife, seguirán criticando su trabajo?

Pienso que sí, porque creo que no se critica mi trabajo.

¿Qué se critica?

Realmente no lo sé, pero no se critica el trabajo, porque el trabajo siempre ha sido el mismo.

¿Le han planteado la posibilidad de dejar el cargo de entrenador y seguir en la dirección deportiva?

No lo sé. No tengo noticias.

¿Daría ese paso?

Siempre dije que soy entrenador. Luego, si se plantean otras cosas, a lo mejor. Pero soy entrenador. Es lo que siempre quise ser y lo que soy. Hay mil funciones y hay otras formas de cumplir un contrato, pero firmé como técnico.

¿Qué pasa con Jacobo?

Tiene una lesión, se la tratan aquí y él quiere una segunda opinión de un médico de su confianza. Con el permiso del club, va a verlo y, según me cuentan, la situación es la misma: lo que le dijeron aquí es lo mismo que le han dicho allí.

¿Tiene para mucho tiempo?

Según entiendo, los médicos le dieron un plazo y si no mejora, habrá que buscar otra solución.

¿Le ha dicho que se quiere ir?

¿Ahora? No.

¿Cree que la situación de los porteros se parecerá a la del año pasado, cuando no siguió Sergio y tuvieron que fichar en enero?

Jacobo dejó de jugar por una fuerza mayor, por una lesión. Y no me ha propuesto nada parecido.