La experiencia laboral ha dotado a miles de trabajadores en toda España con competencias que no se reflejan en una titulación académica. Para resolver este problema empezaron a habilitarse hace unos años procesos que permiten a estos profesionales acreditar estas habilidades y acceder a un título después de cursar una formación complementaria.

Las consejerías de Educación y Empleo del Gobierno de Canarias han ofrecido 3.242 plazas relativas a cuatro familias profesionales desde el año 2011. La intención de ambos departamentos es continuar el procedimiento por dos sectores -construcción y hostelería y turismo- especialmente castigados por la crisis y el desempleo y que registran "un importante número de personas que trabajan sin tener la cualificación adecuada", explica José Moya, director general de Formación Profesional y Educación de Adultos del Ejecutivo autonómico.

La acreditación, matiza Moya, no implica la obtención directa de una titulación. "Se acreditan unidades de competencia, y no todo el mundo cuenta con experiencia suficiente o con pruebas documentales de que se tiene esa competencia". Lo que resta para acceder al título se completa mediante módulos de Formación Profesional.

Hasta el momento, el esfuerzo se había centrado en la atención a las personas dependientes, la educación infantil, el transporte sanitario, la atención en emergencias y la propia hostelería. Construcción y turismo son ahora los sectores prioritarios. "Nos preocupan de forma especial porque creaban empleo y ahora se han quedado prácticamente en nada", comenta el director general.

No obstante, el proceso, estrictamente regulado por la Administración central, no está exento de dificultades. Según Moya, todas las comunidades autónomas coinciden en que es necesario flexibilizarlo. "Es complicado sacar convocatorias y encontrar evaluadores suficientes", expone. Aunque hay comunidades que comparten evaluadores, los factores geográficos impiden esa posibilidad en Canarias, que recientemente ha convocado un curso de formación específica para ejercer como asesor o evaluador en distintas competencias.

El Gobierno canario opina que, en lugar de las actuales convocatorias públicas, es aconsejable implantar "un mecanismo que esté abierto todo el tiempo" con el que atender a "los sujetos singulares".