Tiene apenas 50 años, pero, para generaciones de canarios y, especialmente, tinerfeños, parece que lleva hablándonos al oído desde siempre. Y eso que su timidez le impidió abrir la boca en su primera presencia en Radio Juventud. Esto llamó la atención de su primer mentor (Juan Hernández), quien, tras hacerle una prueba con un supuesto Tenerife-Recreativo, lo incorporó. Más de 30 años después, Domingo Álvarez se sienta desde hace días, aunque poco, pues no para por los estudios, en el sillón desde donde se dirige TVE en Canarias. Lo hace con desparpajo y naturalidad, como asumiendo que es solo una etapa más de una trayectoria brillante, que lo ha llevado a numerosos mundiales de fútbol y baloncesto, juegos olímpicos e infinidad de eventos. "Si buscaban a alguien manipulable para este puesto, se equivocaron de persona", sentencia. Como para tomar nota.

¿El mejor gol o triple que ha narrado o anotado es este cargo?

No.

¿Cuál ha sido?

Mi vida profesional internacional. No hay nada comparable a eso. No tengo "carguitis". Disfrutar de 6 juegos olímpicos, 3 mundiales de fútbol, 5 de baloncesto, 10 europeos de basket... Es algo al alcance de pocos. Además, soy el profesional español de radio en activo con más eventos de esos...

Del fútbol se ha alejado un poco...

Por la crisis; me dijeron que debía elegir: o fútbol o baloncesto, y creo que hice una gran elección en 2006, al optar por el basket y ganar España el mundial de Japón.

¿Ese fue su mejor momento?

En la radio, he tenido muy buenos. He disfrutado cada desplazamiento a tope pues vivo intensamente lo que hago. Eso implica renunciar a muchas cosas, como que jamás he hecho un viaje profesional ligado al ocio.

¿Obsesión por el trabajo?

Sí, quizás sí.

¿Por la excelencia también?

También.

Habla de "carguitis", ¿hay un exceso de eso en España?

Posiblemente, porque un cargo significa muchas prebendas, pero he renunciado a todas. No uso vehículo de empresa; me desplazo en guagua, que pago yo desde que llego al aeropuerto de Las Palmas.

O sea, no tiene tarjeta "black"...

Renuncié a la tarjeta de débito.

Ah, ¿también las hay aquí...?

Sí, para gastos de representación. La tuve como director de RNE en Canarias, pero jamás la utilicé.

¿Recuerda el tope de gasto?

No, porque no la usé. Eso sí, hay que justificar bien los gastos...

Porque entrevistas en balnearios no ha hecho...

Para nada. Renuncié antes de que explotara lo de las "black". Si he de invitar a alguien, lo pago yo.

Como subordinado, ¿ha sufrido la "carguitis"? ¿Se pierde perspectiva en un despacho como este?

En algunos casos, sí. Igual que yo puedo no resultarle agradable a alguien, he tenido jefes que no han sido de mi agrado, pero nunca los traicioné. Siempre he sido muy disciplinado, aunque me lo han puesto fácil porque, en deportes, se suele tener libertad.

¿Colma esto sus aspiraciones en cuanto a cargos directivos?

Sí. Esta casa, en la que llevo 34 años, me ha ofrecido muchas cosas, pero he renunciado.

Estar en Madrid...

En repetidas ocasiones. La última, en 2012, cuando desaparecen todas las direcciones de RNE, absorbidas por TVE. Me proponen dirigir TVE-C, pero la propuesta no cuajó. Se me ofrece ir de directivo de RNE en Madrid y renuncié. Antes de dirigir RNE aquí, me ofrecieron una vez más la dirección de Deportes de la cadena, dije que sí, pero al final me llamaron para llevar RNE en Canarias.

¿Y por qué no ha dado el salto, por su vínculo con las Islas?

Me hacía ilusión dirigir Deportes, pero siempre he creído que cada cosa tiene su momento y entendí que había otras personas más adecuadas, aparte de que lo de RNE lo concebí como un reto y me sedujo llevar la empresa en la que he estado 30 años.

No es habitual renunciar...

Es que soy un tipo extraño, de ahí que renuncie a las prebendas...

¿No es falsa modestia?

No, son realidades. A la gente le sorprende que vaya en guagua...

¿No hay precedentes?

No lo sé.

¿Su balance en RNE?

Lo dicen los números. No comparto eso de que, en los medios públicos, las audiencias son secundarias. Cuando terminó mi etapa, teníamos 103.000 oyentes, cifra al alcance solo de la Ser. Por supuesto, fue producto de los trabajadores y porque se confeccionó un gran equipo, se hizo piña pese a la crisis y conseguimos ser los que más programas nacionales acogimos con empresas o instituciones que los costearon. Exportamos la marca Canarias sin gastar dinero. Me emocionó llenar el TEA, CajaCanarias...

Con estas premisas ¿cómo será TVE-C en, digamos, un año?

Aquí he estado 20 años, muchos altruistamente. No vengo a descubrir la pólvora y respeto mucho a mis predecesores. TVE-C tiene más de 50 años y está más que inventada, pero sí quiero recuperar el espíritu. El personal, y no es un halago gratuito, vale muchísimo por su gran experiencia y ganas de trabajar. Lo que ocurre es que la crisis ha pasado factura, hubo un ERE que descompensó la plantilla y lo que quiero es tener más presencia en las Islas, mayor programación y recuperar señas de identidad, como la luchada.

¿Volverá José Manuel Pitti?

Pitti se acogió a una baja incentivada y se desligó de TVE. Y no soy sospechoso, ya que soy íntimo amigo de él: sería un fichaje extraordinario, y él lo sabe...

¿Tiene futuro TVE-C?

Me dejaré la vida para ello, porque aquí actúo de forma pasional...

Pero, ¿cómo lo ve ahora?

Va a ser complicado porque la crisis se ha llevado muchas cosas, aunque tampoco puedo hablar con exactitud porque no conozco al nuevo presidente de RTVE...

¿Ni de su etapa anterior?

No, porque jamás fui directivo.

¿Y como trabajador, como ciudadano, qué opinaba de aquellos telediarios de Urdaci, lo del 11-M...?

Los datos están ahí, pero le hago un matiz clave: jamás esquivo una pregunta. En esa etapa, estaba en la maravillosa burbuja del deporte. Como le dije a Santiago González cuando me ofreció dirigir RNE: no soy político. Respeto profundamente a los políticos, el mismo respeto que pido para mí. Por eso le dije que, quizás, no era su hombre, pero me respondió que buscaba un profesional objetivo.

¿Y eso existe?

Un periodista ha de ser objetivo...

Ya, pero, por ejemplo, usted tendrá ideología, posturas...

Se ha de ser independiente...

Quizás un periodista sí, pero una empresa... Siempre hay presiones.

Por eso hay que ser consecuente con las ideas que se tienen. Si estás en un cargo y te das cuenta de que implica algún amago de manipulación, no puedes seguir...

Es decir, si siente alguna presión de Sánchez, se marcha...

Por el bien de TVE, espero no sentir ninguna presión. A mí me propone Echenique antes de marcharse y me dijo que quería objetividad y una buena gestión. Le dije que, si eso era así, estaba hablando con la persona adecuada.

Yo no creo en la objetividad, pero sí en la honradez periodística sobre la interpretación de los hechos. ¿TVE-C no ha sido objetiva?

(Larga pausa) Soy un tipo honrado. ¿Se ha sido suficientemente objetivo? No lo sé con exactitud.

¿No lo palpa con la plantilla?

Habría que preguntarles a ellos. Si la etapa no fue limpia, no soy la persona adecuada para decirlo. Sí digo que, conmigo, será limpia.

¿Es compatible la cohabitación con la Autonómica?

No seré el que impulse la ruptura de esta convivencia. Hay gente que dice que la Canaria no debe existir y otros que TVE-C. Creo que pueden coexistir y, si desaparece alguna, que haya garantías de empleo, pues sería una crueldad seguir sumando gente al paro.

¿Qué le parece la autonómica, su programación?

Le dije que no esquivo preguntas. Muchos piensan que soy excesivamente diplomático, pero no lo soy, sino respetuoso. Los informativos los dirige Daswani, un excelente profesional, y, en deportes, han hecho un gran desembolso y me agrada ver el fútbol: ya me gustaría a mí tener los derechos del Tenerife y Las Palmas...

¿Impulsará el deporte, más allá de la luchada?

Sí, pero en todo aquello que nos suponga un coste 0. Ese es el límite.

¿Volverá la lucha los viernes?

Tenemos limitaciones presupuestarias, pero ya hay previsiones para retransmitir un encuentro de liga un domingo por la mañana en noviembre. Queremos ser servicio público. Hemos defendido Tenderete y me encantaría apostar por programas educativos, culturales e infantiles, aunque tenemos la limitación del dinero y, a diferencia de la Autonómica, no podemos recurrir a producción externa. Tenemos una plantilla limitada y con ella hemos de trabajar.

¿No puede crecer lo exteno?

No, y solo supone el 1%. También queremos recuperar el Carnaval y, para 2015, hemos sido los primeros en presentar una oferta a las dos capitales, aunque no significa nada ni da ninguna ventaja.

¿Es factible que emitan, por ejemplo, concursos de murgas?

Sí, pero es complicado. Podríamos aspirar a las fases, pero lo más sensato, quizás, es centrarnos en la final si las fases las ofrece TVC.

¿Y darle cancha a comparsas, agrupaciones, rondallas...?

Sí. Por ejemplo, hemos propuesto retransmitir Ritmo y Armonía con condiciones correctas de iluminación. Me atrevo a decir que la oferta que le hemos hecho a Santa Cruz es irrenunciable.

Más allá del deporte, ¿hay un déficit cultural en la Canaria?

No se moleste conmigo, pero eso es meterme en casa ajena...

Lo pretende para TVE-C...

Pero es que lo tengo más fácil porque nuestra programación es de menos horas y tenemos programas nacionales de calidad.

¿Le gustaría tener algo en especial de TVC, más allá del deporte?

No. Queremos mejorar los informativos, que siempre han tenido picos, y hemos cerrado ya muchas retransmisiones para diciembre.

Destaque dos o tres...

El concierto de Navidad de Los Sabandeños y el de Los Gofiones; el de la Sinfónica y las campanadas, que pretendemos que sean en la Provincia de Santa Cruz...

Hablando de provincias, ¿hay desequilibrios Tenerife-Las Palmas o se han difuminado con TVC?

El ERE descompensó la plantilla y hay más en Gran Canaria. Eso no fue malintencionado, pero puede tener repercusión, aunque voy a fomentar el equilibrio. En RNE, se necesitaba rescatar la emisora de allá y lo conseguí. Ahora lo necesita TVE en Tenerife.

¿Y estar más a pie de obra, como ha pasado con la riada?

Sí. De hecho, hemos recibido múltiples felicitaciones porque, tras estar ausentes en lo regional, no en lo nacional, en estas lluvias estuvimos. Hay grandes profesionales y en fines de semana no hace falta llamarles: vienen voluntarios.

De los años dorados, los 80, 90..., ¿qué más recuperará? ¿El humor?

Para el humor hace falta dinero, pero lo he planteado y estoy en ello.

Willy García cuenta que alguien del PP le dijo que, en TVE-C, necesitaban a un director como él... ¿Se puede colegir que es usted?

Todo lo contrario. Willy tiene un gran sentido del humor...

No descarta ser político...

(Risas) Ese no será mi titular, nunca me dedicaré a la política. Me entrevistó en la radio y le agradecí que dijera que a todo el mundo le gustaría parecerse a mí.

Pero tendrá ideología: se siente de izquierdas, conservador...

Estoy muy lejos de la política y siempre he votado gestión...

O sea, ha votado a CC, PSOE, PP... en función de cada momento...

Sí, según lo que me parecía mejor.

¿A quién premió por su gestión como presidente regional?

(Pausa) Me lo pone complicado. No sabría qué decirle.

¿Y nacional?

No es el momento para decirlo...

Uy, uy, uy... Dará de qué hablar...

No es noticia lo que piense el director. La pregunta está muy bien formulada, pero la mejor respuesta es decir que soy un tipo honrado. Si hubiera un atisbo de manipulación, no estaría aquí.

Pero es compatible decir lo que se piensa con ser honrado...

Estratégicamente, ahora no, aunque si buscaban a alguien manipulable, se equivocaron de persona.

¿Y votaría a Podemos?

Si me convencen, sería una opción más, pero no creo que sea importante lo que vote el director de TVE-C, sino que sea un periodista independiente...

¿Ha habido muchos aquí que no son independientes?

(Pausa). Prefiero no contestar.

Ya ha esquivado varias preguntas: ¿qué piensa del petróleo?

He escuchado las dos partes y celebraré todo lo que sea bueno para Canarias. Si se hacen, hay que minimizar muy bien los riesgos, pues creo que el riesgo 0 no existe. Tendrán que decidirlo.

Por estas cosas, ¿cambiará el modelo de debates, informativos...?

La responsable de los informativos es Cristina Alcaine, aunque asumo toda la responsabilidad. Lo que quiero es objetividad y estar pegados a la sociedad.

¿Se abrirán los debates electorales, sin impedir participar a fuerzas menores como en las Europeas?

Quiero un debate Soria-Rivero sobre las prospecciones y he hecho una propuesta en la casa. Lo de dejar a fuerzas minoritarias fuera no está en mis manos. Si estuviera, participarían. En RNE, hicimos un debate y fuimos felicitados antes y después por el abanico de medios. Pretendo lo mismo.

Ya que insiste, dígame 3 periodistas independientes y objetivos...

(Pausa). No sé. No sé si tienen caras ocultas. Puedo hablar de mí.

¿Y se ha arrepentido de algo: alguna vez no fue independiente?

En política no, porque he hecho siempre deportes...

Pero, ¿de director de RNE?

No, jamás, y nadie lo podrá decir. Tampoco pasará aquí.

Le ha pasado lo de Pitti: ¿censurarle en Tenerife que tirara para allá y al revés? ¿Es eso canariedad?

No lo sé. Viví lo de Pitti a su lado y fue muy cruel. Siempre le apoyé y, aunque a mí no me ha pasado igual, eso no significa que sea mejor, sino que él era más mediático. Los problemas vienen cuando se actúa con maldad.

¿Es difícil el equilibrio?

En deportes, a mí no me resultaba complicado.

Maestros, el gol de Felipe en Auxerre y la falta de padrinos

Álvarez no olvida a sus maestros. Recuerda a Vigoal, padre de Xuancar, "que me decía que se puede opinar de todo". Manuel Negrín fue también importante en su aprendizaje y proyección nacional. En Radio Cadena, ganó las oposiciones en 1988 cuando había solo 12 plazas para 2.000 aspirantes. Su primer mundial de basket fue el de 1986 (España). "Empecé a destacar junto a Juan Carlos Rivero. Cuando RNE absorbe a Radio Cadena, Juan Manuel Gozalo (al que me quería parecer, junto a Chema Abad, como narrador) llama a Quintín Rodríguez y le pregunta a quién debía llevar al Europeo de Zagreb y le dice mi nombre sin pestañear. Al acabar, Gozalo me dijo que le había encantado y que trabajaría con él". Eso sí, presume de no haber tenido "nunca padrinos, sino gente que creyó en mí". De los goles narrados, se queda con el de Felipe en Auxerre. No tiene una canasta decisiva, pero no olvida el fallo de Pau en el Europeo de España de 2007 y el de Nocioni (Argentina) que dio el pase a la final a España en Japón.

"Me sugirieron que ceceara, pero nunca lo he hecho"

Lo mejor de su vida ha sido "haber tenido unos padres excelentes". ¿Lo peor?, la muerte de su padre, "que se aceleró". Según recalca, "intento ser feliz cada día porque soy libre. Defiendo las Islas porque creo en los colores. Me considero feliz, tengo una mujer maravillosa (la periodista Rocío Selis) y una perra que es otro amor compartido. Todo es mejorable, pero no me arrepiento de nada ni creo haber cometido un gran error. Quizás me equivoqué con alguien". Su timidez no le perjudicó para ligar. "No he tenido problemas de novias. Mi mujer conoce mi historial. Tal vez la voz ayuda y nunca he tenido ronqueras. Paso unas revisiones periódicas". La gente le para por la calle, detecta cariño y lo que más le agrada es que le reconozcan en un taxi por su voz. "Me lo sugirieron, pero nunca he ceceado y me ha ido muy bien". De sus anécdotas, no olvida cuando pasó a un avión a punto de despegar en el que se iba el árbitro Díaz Vega de Dallas durante el mundial 94. "Lo pasé en directo con Gozalo, me tuve que ir y gritarle que me devolviera el portátil en Madrid. Ese es el vértigo del periodismo. Díaz Vega narró lo que pasaba sin creérselo". Reconoce que, de pequeño, le tiraba más el Madrid, "pero he perdido la pasión; ni siquiera vivo de forma especial un Tenerife-Las Palmas, aunque un ascenso del Tenerife -ojalá no baje- lo viviría como los anteriores". Sobre su futuro, subraya que cree en el relevo generacional. "Aplaudo a los que están hasta el último momento, pero, para que yo empezara, alguien tuvo que irse. Me gustaría servir de transición".