El pasado 18 de septiembre, la responsable de Viviendas Municipales, Ángela Mena, anunciaba el inicio de los trámites para poder adjudicar las obras destinadas a construir el acceso definitivo al bloque 31 de Miramar, unos trabajos que tendrían un plazo de ejecución de cuatro meses. Es la última noticia para unos vecinos que vieron cómo el 2 de diciembre de 2013 (sí, hace ya prácticamente once meses) una intensa lluvia traía como consecuencia el derrumbe de la entrada al edificio.

Los residentes creen que los técnicos hicieron un buen trabajo con la pasarela "provisional". El problema es que era eso, provisional. La rehabilitación del acceso está integrada en la global del bloque, pero a día de hoy, ni una ni otra. En el bloque 31 de Miramar el tiempo se detuvo un 2 de diciembre, hace casi un año.

Muy cerca, en el bloque 30, la caída de pequeños cascotes de una de las cornisas originó una intervención de Urbanismo que derivó en sanción y el posterior requerimiento a la comunidad para el arreglo inmediato del exterior. Guillermo Alonso, presidente de la AV Ramarim, le explicó al alcalde Bermúdez durante una reciente visita, el problema: "La situación de todos los vecinos del bloque es bastante precaria para poder cumplir con el mandato, pues tendrán que pagar el resto de la rehabilitación del edificio, bajantes, cubierta o audiovisuales, cuando proceda su abono. Y no tienen recursos en su mayoría".

El convenio de la rehabilitación de Miramar se financiaba con aportaciones del Ministerio de la Vivienda (40%); Gobierno de Canarias (30%); Cabildo y ayuntamiento, un 10% cada uno, y los vecinos, que ponían el otro 10%. "La guerra entre administraciones con la gente en medio lo paró todo", dice Alonso.

Miramar se divide en ocho calles y 32 bloques: Gandhi (1 y 2), Hermanos Maffiotte (3, 4, 5 y 6), Doctor Dominé (7, 8, 9, 10, 11 y 12), Nicolás Paquet (13, 14, 15 y 16), Antonio López López (17, 18, 19, 23, 24 y 25), Francisco García Talavera (20, 21, 22 y 26), Ernesto Anastasio (28, 30 y 32) y Carretera General de El Rosario (27, 29 y 31).

Solo 52 viviendas rehabilitadas de 190

Miramar es un barrio del distrito Ofra-Costa Sur con 32 bloques y 190 viviendas. En un ya lejano mes de mayo de 2007 se aprobó, dentro del Plan Estatal de Viviendas 2005-2008, la primera fase del Área de Rehabilitación Integral (ARI) con una actuación programada sobre 94 viviendas y una inversión de 1.057.500 euros. Eso, en teoría, porque la realidad, a día de hoy, es muy diferente. De hecho, solo se han rehabilitado por completo 52 viviendas, las correspondientes al bloque 32.A esta primera fase solicitaron acogerse, a través del convenio entre administraciones, los siguientes cinco bloques: 32 (52 viviendas), 21 (18), 16 (8), 10 (8) y 3 (8). En total, 94 viviendas. Solo ha finalizado de esta fase la rehabilitación de las 52 viviendas del bloque 32 con actuaciones por un importe de 585.500 euros.

Dentro del nuevo Plan de Viviendas y Rehabilitación para el período 2009-2012 se aprobó, con fecha de 15 de noviembre de 2011, la Segunda Fase del ARI de Miramar con una actuación sobre 96 viviendas y una inversión prevista de 1.292.500 euros. De momento, ni siquiera se ha iniciado.