Miembros del Cuerpo Nacional de Policía realizaron en la mañana de ayer una explosión controlada de un detonador abandonado en el barrio de Añaza.

Los hechos ocurrieron cuando una persona detectó que, del interior de una piedra de grandes dimensiones, salían unos cables.

Hasta el lugar acudieron agentes de la Policía Local y del Cuerpo Nacional de Policía. Debido a las características del objeto, fueron activados miembros del Tedax de la Policía Nacional, que confirmaron que, incrustado en el interior de una piedra de grandes dimensiones, existía un detonador. Los agentes especializados procedieron a la explosión controlada del mismo. Supuestamente, el citado detonador fue abandonado en el lugar cuando se realizaron las obras de desmonte y urbanización del barrio de Añaza. Los hechos ocurrieron en la confluencia de la calle Gabino Jiménez con la Rambla de Añaza.