La gobernabilidad de Güímar está en entredicho. Ayer, en dos sesiones plenarias extraordinarias, se reflejó la situación política que vive un municipio que en este mandato ha tenido tres grupos de gobierno. La oposición, ahora mayoría, votó unida su propuesta de recuperar para el Pleno las competencias que tenía delegadas en la Junta de Gobierno Local. Resultado: el pacto gobernante (PP y CC, pero en minoría) pierde casi toda capacidad de gestionar.

Rafael Yanes (PSOE) -primer alcalde del mandato- explicó que se trataba de "devolver las competencias a la mayoría". Sixto Alfonso (AxG) -expulsado del segundo gobierno municipal- incidió en ese aspecto. Gloria García (Sí se Puede) aclaró que la iniciativa no debe ser entendida como un bloqueo al gobierno del municipio.

Carmen Luisa Castro, la alcaldesa, dijo no entender la actitud de sus opositores porque "las competencias se delegan para acelerar" la gestión y criticó que "la primera medida de la mayoría en la oposición" fuera de este tipo.

Todo ello en apenas siete minutos. Una sesión plenaria fugaz pero que escenificó una situación que se repetirá en los meses que restan de mandato. De hecho, una hora después tuvo lugar otro pleno en el que se abordó un asunto que hasta 60 minutos antes era competencia de la Junta de Gobierno Local.

Lo decidido ayer supone que el Pleno se convierte en el órgano de gestión, prácticamente, del Ayuntamiento de Güímar ya que tiene todas las competencias urbanísticas y económicas relevantes, así como las ordenanzas.

Hasta tal punto son conscientes de que esa es la situación que la oposición esgrimió tal argumento para justificar su propuesta -finalmente aprobada con sus nueve votos, frente a los ocho del gobierno municipal- de celebrar una sesión plenaria cada mes, cuando Güímar está obligado a hacerlo cada dos meses. Eso sí, todos los grupos políticos renuncian a cobrar las dietas correspondientes a los plenos que tendrán lugar en los meses pares, que son los imprevistos.

Todo esto es el penúltimo capítulo de un mandato convulsionado desde que el 23 de mayo de 2013 Carmen Castro, con CC y AxG, censuró a su socio hasta entonces, Rafael Yanes (PSOE), y la propia Castro destituyera a otro socio, Sixto Alfonso (AxG), el 23 de octubre pasado, perdiendo la mayoría.