La Consejería de Industria del Gobierno de Canarias y las empresas adjudicatarias de potencia eólica en las Islas coincidieron ayer en la necesidad de que el Estado amplíe la fecha límite para la puesta en marcha de los parques eólicos, fijada en diciembre de 2016.

Todos los parques que quieran acogerse a un cupo de 440 megavatios, con una retribución media de 84 euros por megavatio por hora, deben estar en marcha el 31 de diciembre de 2016, recordó la directora general de Industria y Energía de la Comunidad autónoma, María Antonia Moreno, para quien la fecha que impone el Ministerio de Industria "es difícil de cumplir", por lo que espera que el Estado sea flexible.

El presidente de la Asociación de Adjudicatarios del Concurso Eólico de Canarias, Claudio Palmés, cree que el Ministerio "ha sido demasiado ambicioso" con una fecha que, en la práctica, ven de "imposible cumplimiento", pues los promotores de parques eólicos no pueden instalarlos antes de esa fecha, ya que las infraestructuras de conexión, que son "como los enchufes donde se conectan", no están construidas y deben estarlo antes de finalizar los parques. Por ello, los promotores confían en que el Ministerio amplíe la fecha y establezca otra que sea "más razonable", dijo Palmés, quien se reunió, junto a representantes de empresas adjudicatarias de energía eólica, con la consejera de Empleo, Industria y Comercio del Gobierno de Canarias, Francisca Luengo (PSOE), y la directora general de Industria.

Palmés recordó que la fecha fijada es importante, pues da derecho a percibir la retribución económica establecida, y advirtió de que debe tenerse en cuenta el tiempo que Red Eléctrica necesita para construir las subestaciones.