Unos desconocidos provocaron daños en un vehículo radiopatrulla de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife en el exterior de la oficina de denuncias situada en el barrio de Añaza durante la madrugada del pasado viernes.Los autores de los daños tiraron piedras contra la luna trasera de un Skoda Octavia y la fracturaron. Posteriormente, unos individuos pasaron en un ciclomotor y rompieron la denominada “torreta” de luces del mismo coche con un palo u otro objeto contundente.Además, en la zona quemaron un contenedor de basura.Una de las fuentes consultadas por EL DÍA explicó que estos hechos, principalmente los ataques contra el automóvil radiopatrulla, son represalias a raíz de una intervención desarrollada por miembros de la Unipol, con el apoyo de agentes del Cuerpo Nacional de Policía, durante la noche del pasado jueves. Dos jóvenes, de 26 y 18 años, fueron detenidos en la parcela I-13 de Añaza como presuntos autores de un robo de un ciclomotor. La actuación de los agentes se produjo a las 20:00 horas a raíz de un aviso de vecinos de la zona, que informaron que los acusados estaban despiezando la citada moto, que había sido robada la misma mañana del jueves en otro enclave de Añaza. Respecto a este vehículo, le faltaba el bombín de arranque.Dicha moto fue trasladada al depósito municipal en una grúa hasta que pueda ser recuperada por su propietario.Pero es que, además, los dos arrestados tenían otros dos ciclomotores desmontados, aunque en estos dos casos sí tenían los papeles.Como consecuencia de este servicio, varios vecinos de la zona apedrearon a los vehículos radiopatrullas que intervinieron.Tras la instrucción de las primeras diligencias, los arrestados fueron trasladados hasta los calabozos de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Tres de Mayo.Esta es la segunda vez en pocos meses que desconocidos causan daños importantes en vehículos radiopatrullas de la Policía Local en Añaza, tras otro servicio de los agentes. El anterior fue a finales de agosto.Fuentes policiales señalan que, para evitar cualquier tipo de incidente, a este barrio santacrucero siempre que se va a notificar algún papel a un vecino se acude con dos coches policiales. El objetivo es que, mientras uno o dos agentes acuden a la vivienda de la persona que recibe la notificación, la otra dotación policial se queda vigilando el radiopatrulla, para evitar robos o destrozos.