El autor de la primera Ley de Quiebras de China y negociador gubernamental durante las protestas prodemocráticas de Tiananmen de 1989, Cao Siyuan, falleció este viernes en Pekín a los 68 años, informó hoy la prensa china.

Ingresado en un hospital de la capital china desde el pasado 16 de noviembre, Cao, que padecía cáncer, murió de un fallo cardíaco y pulmonar, según señaló el diario South China Morning Post.

Cao trabajó con el Gobierno de Deng Xiaoping en importantes reformas económicas y políticas llevadas a cabo durante la década de 1980, entre las que destacó la primera Ley de Quiebras del país, aprobada en 1987, que le valió el apodo de "Cao Bancarrota".

Durante las protestas de Tiananmen de 1989, fue uno de los intelectuales elegidos por el Gobierno chino para negociar con los estudiantes el cese de las revueltas.

Cao era partidario de una salida pacífica e insistió en que la matanza con la que acabaron las protestas se podrían haber evitado si la Asamblea Popular Nacional hubiera convocado una sesión extraordinaria para buscar un solución no violenta.

Sin embargo, Cao acabó siendo repudiado por el Gobierno y fue encarcelado durante casi un año acusado de ser una "mano negra" y uno de los cerebros del movimiento de Tiananmen.

A lo largo de las últimas dos décadas, el intelectual siguió defendiendo un mayor respeto a los derechos civiles en China y pidió a las autoridades en repetidas ocasiones que retirara el concepto de "dictadura del proletariado" de la Constitución china.

A juicio de Cao, sólo la adopción de más reformas evitará que el sistema acabe colapsándose en China.

Estos pronunciamientos abiertamente reformistas pusieron a Cao en el punto de mira del régimen chino, que envió a agentes de seguridad a seguir sus pasos y bloqueó las actividades del centro de estudios independiente que creó durante etapas políticamente sensibles.