La candidata socialista a la Presidencia del Gobierno de Canarias, Patricia Hernández, ha mantenido esta mañana un encuentro con jóvenes en Las Palmas de Gran Canaria con quienes se ha comprometido a trabajar para acabar con el "exilio económico" de aquellos que no encuentran una oportunidad laboral ni un "resquicio" para iniciar un proyecto de vida propio.

Durante el encuentro, aprovechó para conocer las inquietudes y objetivos laborales de la que consideró "la generación más preparada de nuestra historia", un colectivo "afectado por una tasa de paro superior al 60 por ciento" y en el que una de cada tres personas que tiene un trabajo "cobra por debajo del salario mínimo".

"Tenemos que buscar fórmulas entre todos y todas para que se queden, porque los necesitamos para que nuestra comunidad autónoma avance", afirmó Hernández, quien aprovechó para invitar a la juventud a participar de "una nueva manera de hacer política que pretende evitar que se vean obligados al exilio y que quiere aprovechar su talento".

La candidata explicó que el objetivo de este encuentro "era verles y que se sientan escuchados, saber que hay una historia detrás de cada dato, de esos contratos precarios de dos o tres horas semanales o de las cifras de desempleo". De hecho, avanzó que éste es el primero de una serie de encuentros que mantendrá para "poner rostro a cada cifra de paro y a cada contrato precario".

"Algunos mantienen con su sueldo escaso el hogar de sus padres; otros muy formados no han tenido todavía su primera oportunidad laboral y no saben cuándo tendrán un proyecto de vida autónomo, propio, y el no estar cotizando va a condicionar incluso su vida en la vejez, con la pensión", explicó.

Patricia Hernández quiso dejar claro que ésta "no va a ser una generación perdida". "No lo vamos a permitir", aseguró. A su juicio, la juventud canaria "será la que ponga al archipiélago a la vanguardia de Europa". "Así debe ser porque hemos trabajado todos, mis abuelos y los suyos, para que tengan hoy todo ese talento y ese empuje", dijo.

En este asunto radica uno de los principales objetivos de la candidata socialista, que no dudó al advertir de que no va a permitir que esta generación "se vaya de Canarias". "No nos lo podemos permitir como sociedad. No despilfarraremos su talento y su empuje, ni tampoco todo el sacrificio que hemos hecho jóvenes, familias e instituciones públicas de las islas para hacer posible su formación", aseveró. A su juicio, son "gente muy preparada a la que, si no ponemos solución, se van a rifar fuera. Les necesitamos", concluyó.