El desempleado tinerfeño puede llamarse Jonay, Candelaria, Manolo, Guacimara o de cualquier manera, si se atiende a que entre nombres y edades suele haber cierta conexión. Y es que el paro en la Isla -como en toda España- está generalizado desde hace ya bastante tiempo. Nada nuevo. Pero ¿cuál es ahora mismo la situación? De entrada, a quienes cuantitativamente más afecta es a los habitantes de Santa Cruz y La Laguna, los municipios más poblados pero también donde viven cuatro de cada diez parados. Para ser exactos, el 42,22%.

Eso reflejan los datos de noviembre del Observatorio de Empleo Canario (Obecan), del Gobierno de Canarias, que sitúan en Tenerife a un total de 111.038 desempleados. De ellos, 26.821 están empadronados en Santa Cruz y 20.061, en la vieja Aguere y sus barrios. Por detrás: Arona (8.081), La Orotava (5.849) y Granadilla (5.276). En el extremo opuesto (y con mucha menos población, todo sea dicho): Vilaflor (148), El Tanque (320) y Fasnia (334).

No menos alarmantes son las cifras referidas a la formación. Del total de personas sin empleo en Tenerife, un 45% y 49.986 se quedaron en los estudios primarios. Alrededor de 47.200 (42,53%) llegó a Secundaria. El resto hicieron Formación Profesional (5,43%) o están dentro de los 7.713 universitarios (6,95%). La última opción es que se les considere analfabetos (0,07% y 86 casos). Eso sí, sobre el nivel formativo más bajo, destaca que 11 localidades no cuentan ya en sus listas del paro con ninguna persona en esa situación.

Mención aparte merecen las oscilaciones que se producen entre Primaria y Secundaria. Si La Laguna tiene 6.530 ciudadanos con formación primaria y 10.452 que alcanzaron estudios secundarios, en Santa Cruz es al revés: 12.696 y 10.250. Las demás localidades presentan datos más o menos parejos entre ambas alternativas o gana la Secundaria. Sin embargo, en varias zonas del Sur se dispara la Primaria: 5.956 frente a 1.676 en Arona, 1.607 y 431 en Guía de Isora, 2.405 y 705 en Adeje, y 3.468 y 1.428 en Granadilla.

En concreto, 103.478 desempleados tienen más de 25 años y 7.560, menos; pero se debe tener en cuenta que la franja de edad segunda tiene muchos menos potenciales trabajadores. Por sexos, 54.250 son hombres y 56.788, mujeres. ¿Y a qué se dedicaban antes? Al comercio, construcción u hostelería, como categorías destacadas. Mientras, 7.356 figuran "sin actividad".

Y si preocupantes son las cifras del que muchos señalan como el gran problema nacional o al que emparejan con la corrupción, más lo son las historias, sufrimientos y circunstancias derivadas. Ahí es donde está el drama.