Además de regalos y vacaciones la Navidad trae la gripe, una enfermedad vírica que cada año afecta a entre un 10 y un 15 por ciento de la población y cuyo pico más alto se sitúa normalmente entre Nochebuena y el día de Reyes.

¿Se puede escapar de la gripe?. "Se puede, si el día 1 de diciembre coges un avión y te vas a Buenos Aires y te quedas allí tres meses", exagera, en una entrevista, el doctor José Luis Cañada, coordinador del grupo de trabajo de enfermedades infecciosas de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen). Porque no todo el mundo que se quede en España durante la temporada de gripe va a infectarse, matiza.

De lo que sí está absolutamente convencido es de que no existe nadie que no haya tenido gripe en toda su vida. Otra cosa diferente es que no se recuerde, ya que lo habitual es que aparezca por primera vez antes de los cinco años. Y es que, como dice el doctor Cañada, "la gripe es una enfermedad de niños y adolescentes, lo que pasa es que las consecuencias las pagan las personas mayores; son las que pagan el pato".

De hecho, la mayor parte de los que fallecen a consecuencia de la gripe -entre 1.500 y 3.000 cada año en España- son personas mayores o tienen factores de riesgo. Polimedicados, cardiópatas, enfermos de riñón, diabéticos, afectados de enfermedad pulmonar crónica, obesos y fumadores "están en minusvalía frente a una enfermedad respiratoria y van a sufrir las consecuencias". Últimamente están también muriendo personas jóvenes y sin factores de riesgo, advierte el doctor Cañada.