El entrenador del Tenerife, Álvaro Cervera, ha resaltado hoy que su equipo juega cada partido como si fuese una final, porque parece que después de cada encuentro puede pasar algo, y que están en un momento clave para que el parón navideño llegue con cierta tranquilidad en el entorno.

El técnico tienerfeñista ha reiterado que su intención es llegar a enero con tranquilidad para que "las cosas que se vayan a hacer se hagan desde la calma y no desde la rapidez o la improvisación".

Álvaro Cervera ha afirmado que el Alcorcón, rival del domingo, siempre ha sido un equipo muy complicado en su estadio y que este año se siente "muy cómodo jugando de la forma en la que lo hace".

El entrenador ha indicado que el equipo madrileño "te lleva siempre al límite, corre y presiona mucho", un estilo de juego que se parece "al buen Tenerife de intensidad y empuje".

En cuanto al mercado invernal, Cervera ha informado de que la intención de la comisión deportiva de la entidad sigue siendo contratar a un portero, posición en la que "no hay que dudar mucho", aunque ha recordado que el joven Carlos Abad-Hernández lo está haciendo bien.

El técnico ha confirmado que el meta Roberto Gutiérrez ya está disponible, pero ha explicado que creen que es necesario fichar a un meta con experiencia, ya que no pueden "poner el foco" solamente en tres porteros jóvenes.

En cuanto al centrocampista madrileño Aitor Sanz, el entrenador ha dicho que todavía no ha cogido el ritmo y que se nota que ahora le cuesta "un poco más recuperar" cuando hace cosas que "antes hacía son soltura".

En su comparecencia ante los medios informativos, ha insistido en que es necesario dejar la portería a cero -el Tenerife ha encajado en todos los partidos que ha disputado a domicilio en el último año- porque para ganar fuera es importante no recibir goles.