El presidente de Rusia, Vladímir Putin, aseguró ayer que la nueva doctrina militar rusa seguirá siendo defensiva, por lo que no incluirá la posibilidad de un ataque nuclear preventivo pese la creciente actividad de la OTAN en Europa del Este.

"Pese a todo, nuestra doctrina militar no cambia. Tiene, como es sabido, un carácter exclusivamente defensivo, aunque nuestra seguridad la defenderemos de manera consecuente y firme", aseguró Putin.

En una reunión de altos cargos del Ministerio de Defensa, Putin recordó, entre otras amenazas, el despliegue en Europa "de un sistema escalonado de defensa antimisiles por parte de Estados Unidos".

"¡Ven qué amenazas surgen a nuestro alrededor!", subrayó, en alusión a que Moscú considera el emplazamiento de elementos estratégicos del escudo norteamericano en Rumanía, Bulgaria y Polonia como una amenaza directa para su seguridad.

Rusia defenderá siempre de manera congruente sus intereses y su soberanía

Además, destacó que "ha aumentado la actividad de la OTAN en Europa y, en particular, en Europa del Este" después de que varios países aliados, como Polonia y los bálticos, alertaran sobre el expansionismo de Rusia tras la anexión de Crimea.

"Como siempre, Rusia defenderá de manera congruente sus intereses y su soberanía, buscará fortalecer la estabilidad internacional, abogará por una seguridad paritaria para todos los estados y pueblos", señaló.

La nueva doctrina, que será aprobada en breve, será una versión renovada de la anterior de 2010, aunque tendrá en cuenta nuevos factores geopolíticos vinculados con el terremoto causado en la seguridad continental por Crimea y el conflicto en el Este de Ucrania, donde Rusia habría desplegado fuerzas regulares, según Kiev y Occidente.