Los presupuestos del Cabildo de La Palma para el próximo ejercicio destinan apenas 190.000 euros a la empresa pública que la propia institución insular creó para la construcción y desarrollo del Parque Tecnológico en Risco Alto, Breña Baja, lo que deja al descubierto que uno de los proyectos "estrella" del ahora presidente insular, Anselmo Pestana, no termina ni tan siquiera de arrancar.
La empresa pública, que además de un gerente bien remunerado dispone del apoyo de funcionarios del propio Cabildo, contó en 2014 con un presupuesto de 555.137 euros, por lo que la reducción en un solo año alcanza nada menos que el 65,77%, es decir, 365.137 euros.
Al ser cuestionado por la posibilidad de que las cuentas de 2015 dejen entrever que se haya optado por prácticamente arrojar la "toalla" con este proyecto, Pestana lo negó, aclarando que se está a la espera de confirmar "las ayudas de otras administraciones". Y en eso, no le falta razón. Tanto el Gobierno de Canarias como el Estado anunciaron a lo largo de los últimos años sus compromisos con el parque tecnológico palmero como referente de nuevas tecnologías, pero la realidad es que nada o muy poco se ha traducido en dinero.
Y ya viene de lejos. Anselmo Pestana anunció el 16 de noviembre de 2011, cuando gobernaba con Coalición Canaria y era vicepresidente del Cabildo y consejero Nuevas Tecnologías, entre otras áreas, que el Parque Tecnológico de La Palma estaría acabado en un plazo de dos o tres años, es decir, en 2014 a lo sumo. La realidad: no se ha puesto ni una piedra. No fue la única vez que sus previsiones fallaron. En abril de este año, el presidente insular anunció que esta obra comenzaría a finales de 2014. Pues tampoco. Es lo que ocurre cuando se depende del dinero de otras administraciones.