El Servicio Canario de Salud (SCS) ha citado a Gilberto González Toledo para realizarle un eco doppler venoso el 28 de abril del año 2016. Se trata de una prueba diagnóstica con la que determinar el tratamiento más adecuado para una varices muy desarrolladas que padece en la pierna izquierda, sin embargo, para este lagunero de 72 años la espera es "más que excesiva" y ya ha presentado reclamaciones tanto en el Hospital Universitario de Canarias (HUC) como ante el Diputado del Común.

Y es que además de su avanzada edad, Gilberto González es diabético y ha sido operado del corazón, por lo que es considerado un caso de riesgo alto.

Su hijo, que también se llama Gilberto, detalla la reacción de su padre cuando le notificaron la fecha de la consulta.

"Literalmente, y con un gran sentido del humor, le dijo a la señorita de la ventanilla del Centro de Atención de Especialidades de San Benito que no se preocupara y que si para finales de abril de 2016 no podía ir a la prueba que ya mandaba sus cenizas con mi madre, su esposa, para a ver si con ellas podían hacer algo", explica en tono de broma su hijo que, no obstante, se ha tomando muy en serio la situación de su padre y es el que ha presentado y argumentado todas las quejas.

"La ley establece que ningún paciente puede esperar por una prueba más de 90 días, es decir, tres meses, pero a mi padre le están dando cita para más de año y medio después de cuando su doctora la ha solicitado. Si a esto se suma que es un paciente de alto riesgo resulta incomprensible y una vergüenza", detalla el joven.

Y es que, por el momento, ni la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias ni el Diputado del Común le han respondido a la queja, puesto que solo le han confirmado que se ha recibido su solicitud y que se le responderá, "o no, porque Sanidad dice que si en dos meses no me han dicho nada que vuelva a presentar una reclamación", detalla el hijo de este paciente.

Obviamente la familia se está planteando acudir a un centro privado para adelantar la prueba, pero su hijo asegura que "es la última opción y que esperan evitarlo".

"A mi padre le han tratado siempre, y además lo han hecho muy bien, en el HUC y nos gustaría que siguiera siendo así porque es donde tiene todo su expediente. De todas maneras está claro que año y medio no podemos esperar por esa prueba porque, aunque él se cuida mucho, es demasiado tiempo y puede tener complicaciones", explica Gilberto hijo.

Y es que su padre reconoce en los escritos de queja que ha presentado tanto antes el SCS como en el Diputado del Común que esta espera aumenta el riesgo de que pueda sufrir infecciones y hemorragias por rotura, flebitis, úlceras, trombos, etc. que agraven su estado de salud y que incluso podrían llegar a provocarle la muerte.

"Quiero hacerles constar el estado de necesidad e incertidumbre que me genera esta situación -narra este paciente en el escrito presentado en el HUC-, puesto que si se me remite a un médico especialista o bien me solicitan un prueba diagnóstica es porque no existe certeza sobre mi problema de salud y, consiguientemente, no se me aplica el tratamiento médico adecuado", insiste.

Por su parte, desde la dirección del HUC se asegura que existen programas que se ponen en marcha periódicamente cuando se observa que para alguna prueba diagnóstica tiene una espera importante y es lo que se está haciendo en estos momentos concretamente para la eco doppler. Recalcando que ya se ha puesto en marcha un programa para poder adelantar las citas que esperan por esta prueba.