La presencia de camillas en los pasillos del Servicio de Urgencias del Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria (HUNSC) no es ninguna novedad desde hace varios años, según confirman tanto el personal como los responsables sindicales, que califican la falta de espacio de "insoportable" y "tercermundista".

Como ejemplo sirvan las imágenes tomadas el pasado día 18 de diciembre (jueves) y otras de ayer mismo en las que se ven pasillos abarrotados de pacientes.

En ambos casos y, según relatan los propios trabajadores del centro, la afluencia fue media, si bien es cierto que en ambas fechas (sobre todo ayer) había numerosos pacientes de días anteriores.

Los profesionales aseguran que "camillas en los pasillos hay siempre, todos los días, hasta el punto de que los pasillos están numerados y el A es para los mujeres y el B para los hombres".

Pero, si este es el día a día, ¿qué sucede cuándo hay los denominados "picos de pacientes"?.

Los sanitarios aseguran que se coloca a los pacientes en camillas en doble o incluso triple fila. Esto supone que los especialistas a veces tienen que ver a los pacientes en el propio pasillo, con el consiguiente trastorno que significa eso, por no hablar de la falta de intimidad.

Y es que aunque hay "otras muchas y graves deficiencias", el personal lo que reclama con "máxima urgencia" es más espacio, puesto que, por ejemplo, los propios facultativos a veces ni siquiera pueden atender a más pacientes porque no tienen un lugar donde verlos.

"La situación no es nueva", detalla la delegada del sindicato de enfermería Satse, Ramona Mendoza, para la que "la falta de infraestructuras y la saturación de la demanda se ha unido a la inexistencia de voluntad política".

A juicio de Mendoza, "el problema va más allá de la dirección de La Candelaria y requiere la implicación de los más altos niveles del Gobierno de Canarias, que, por el momento, no han hecho nada".

Asimismo, recordó que el proyecto de construcción de nuevas urgencias y de un edificio de aparcamientos "duerme el sueño de los justos y ni está ni se le espera".

"¿Quién quiere ir a trabajar en estas condiciones en las que parece más un hospital de campaña que otra cosa?", se pregunta la dirigente del Satse.

Desde Intersindical Canaria insisten en que, además de las carencias de la infraestructura, "que son públicas y notorias", hay una "falta brutal de personal", según su portavoz, Patricia Hernández.

A su juicio, "a la falta de inversión durante años se unen la falta de personal y un empeoramiento de la salud de la población a causa de la crisis, por lo que no se puede hablar de picos de pacientes; por desgracia, esta ya es la normalidad", sentencia Patricia Hernández.