El acusado por los atentados de la maratón de Boston de 2013, Dzhokhar Tsarnaev, asistió hoy a la primera jornada de selección del jurado que podría condenarlo a muerte en un juicio que comenzará el 26 de enero.

El proceso judicial podría alargarse hasta cuatro meses, según indicó hoy el juez federal George 0''Toole en una sala del tribunal de Boston (este de EEUU) repleta y rodeada de estrictas medidas de seguridad.

Tsarnaev, de 21 años, se enfrenta a la pena de muerte por colocar junto con su hermano Tamerlán, de 26 años y muerto tras una persecución policial posterior, dos bombas caseras en la recta final de la maratón del 15 de abril en Boston, que acabó con la vida de tres personas e hirió a 260, 17 de ellas con serias amputaciones.

El joven, de origen checheno y que reside en Estados Unidos desde los ocho años, se enfrenta a 30 cargos, entre ellos el de uso de un "arma de destrucción masiva" y la muerte de un agente de policía del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) en la huida en la que falleció su hermano en las afueras de Boston.

Hoy el juez y los equipos de la defensa y la fiscalía comenzaron a pasar revista a los 1.200 candidatos a jurado que desfilarán en los próximos tres días, en los que se determinará quién compondrá la selección de doce miembros del jurado y los seis suplentes.

El juez O''Toole recordó a los candidatos, todos residentes del este de Massachusetts, que deberán evitar verse expuestos a los comentarios en medios de comunicación y redes sociales sobre el caso y no podrán investigar por su cuenta en internet sobre lo ocurrido.

Los miembros del jurado solo podrán ser elegidos si dejan la puerta abierta a condenar a Tsarnaev a la pena capital.

La pena de muerte contra el acusado ha sido solicitada a nivel federal, ya que el estado de Massachusetts abolió esta práctica en la década de los 80.

Si el acusado es enviado al corredor de la muerte debería ser ejecutado en otro estado, probablemente Indiana, tras agotar la vía del recurso.

La abogada defensora de Tsarnaev, Judy Clarke, experta en pena de muerte, ha intentado durante los preparativos judiciales que el magistrado retrasara el inicio del juicio y que eligiera otra ciudad para su celebración, debido al trauma por el que pasó Boston por un ataque totalmente inesperado durante un evento deportivo y festivo que congrega cada año a miles de personas.

En las vistas previas al juicio, la defensa ha dejado entrever que su estrategia podría basarse en subrayar como atenuante que Dzhokhar fue influenciado por su hermano mayor para cometer los atentados y descargar la responsabilidad en el fallecido Tamerlán.

Tsarnaev estuvo presente hoy en los juzgados de Boston con apariencia calmada, mesándose la barba y observado a los candidatos a formar parte del jurado sin pronunciar palabra alguna, según testigos y medios locales presentes en la sala.

Varios amputados por las explosiones de las dos ollas a presión casera colocadas en la línea de meta del maratón estuvieron presentes hoy en la sala y aseguraron que asistirán al juicio, donde intervendrán testigos y víctimas y donde se intentará conocer más sobre las motivaciones que llevaron a los dos hermanos Tsarnaev a cometer una masacre.

La familia Tsarnaev es de etnia chechena y emigraron a Estados Unidos desde el Daguestán ruso cuando Dzhokhar era solo un niño y Tamerlán tenía 15 años.

Ambos se educaron en Cambridge (Massachusetts), donde residían, y se integraron en la sociedad estadounidense, pero aparentemente Tamerlán comenzó una deriva extremista que le llevó a persuadir a su hermano menor a preparar unos atentados en solitario que escaparon al radar de las fuerzas de seguridad.

En una entrevista con ABC News publicada hoy, el padre de los Tsarnaev, que se encuentra en Daguestán, dijo que "los estadounidenses buscan hacer daño" a su segundo hijo "del mismo modo que hicieron con el mayor (Tamerlán)... todo está en manos de Alá".