Tino Luis Cabrera se ha convertido en la sombra del CD Tenerife esta temporada. Ha visto todos sus partidos por una coincidencia curiosa: cada rival blanquiazul se enfrenta dos semanas más tarde al equipo para el que ejerce como ojeador, el Real Betis Balompié. Se incorporó a su estructura este verano de la mano del también grancanario Alexis Trujillo y, desde entonces, no para de hacer kilómetros para elaborar todos los informes posibles.

Desde Ponferrada, en la primera jornada de la competición, se le ha visto en cada desplazamiento de los insulares. Pero también, como el pasado domingo, en el Heliodoro Rodríguez López. "Del equipo que vi en Ponferrada al equipo que es hoy ha cambiado muchísimo", analiza Tino Luis que observa cierta dependencia de algunos jugadores clave, "como le sucede a muchos equipos en esta categoría y tal y como está el fútbol ahora".

Se refiere, fundamentalmente, a Diego Ifrán. "Con él tiene mucha pegada y es verdad que cuando no está es otro equipo, igual que si le faltara Suso en alguna jornada", describe el técnico grancanario. Esa diferencia se ha visto sobre el terreno en las jornadas en las que el delantero uruguayo no ha estado disponible para Álvaro Cervera y ha quedado plasmada en los números.

No obstante, no es algo que hable de una mala planificación del Tenerife, sino que sucede "en todas las plantillas cortas". Así lo ve Cabrera que ve "bien dirigido" al conjunto insular por su actual entrenador, "a pesar del ambiente que hay". Rompe de esta forma una lanza en favor del actual inquilino del blanquillo tinerfeño, ya que ha sido capaz de competir "con poco" y ha mejorado "cuando ha podido contar con todos sus recursos".

La "evolución" que observa Tino Luis tiene que ver con estas circunstancias, por lo que mantiene que "como otros equipos" el Tenerife tiene margen de crecimiento. "Es un equipo capaz de ganar a cualquiera y perder con cualquiera y que está dando un nivel aceptable", sentencia.