La Bolsa española registró ayer las mayores pérdidas de entre las principales plazas europeas, que, en una jornada más, se han visto arrastradas por los temores que suscita una posible salida de Grecia de la eurozona, además de por la caída del precio de crudo y de la moneda única, el euro.

En concreto, la bolsa española ha sido la que más ha perdido en la sesión tras bajar el 1,22%, seguida del mercado de Londres, que se ha dejado el 0,79%; el de París, el 0,68%; el de Milán, el 0,25%; y el de Fráncfort, el 0,04%.

Y ello a pesar de que los mercados europeos, tras el desplome sufrido el lunes, inició la sesión intentando la recuperación, que se vio sustentada después por la apertura en positivo de Wall Street.

No obstante, tras el desplome que sufría el precio del petróleo, el mercado de EEUU volvía a teñirse de rojo, y con ello, las plazas europeas.

La caída del precio del petróleo también afectaba a la moneda rusa, el rublo, que se volvió a despreciar ayer, mientras que la Bolsa de Moscú sufría descensos de casi el 2%.

A todo ello todo se unía en Europa la incertidumbre sobre el futuro político de Grecia, ante las elecciones que se celebran el próximo 25 de enero, unos comicios de los que podría salir vencedor el partido izquierdista Syriza, contrario a las medidas aprobadas con Europa a cambio de la ayuda que recibió el país.

Aunque Syriza aseguró que, en caso de una victoria de la izquierda, el país seguirá en el euro y negociará con sus socios, el ex presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, advirtió que si el país "no cumple" con sus compromisos "habrá consecuencias", aunque se mostró "confiado" de que "cumplirá con sus obligaciones".

En este sentido, el presidente del instituto de estudios económicos de Múnich Ifo, Hans Werner Sinn, pidió convocar una conferencia internacional sobre la deuda griega, dirigida a hacer posible una salida temporal del país del euro para ganar competitividad.

Ante esta situación, la elevada volatilidad del mercado, y la caída del euro a mínimos del entorno de 1,192 dólares, de nada servía a las bolsas conocer que el Banco Central Europeo (BCE) podría estar estudiando tres posibles opciones para comprar bonos soberanos.

De la misma manera, la incertidumbre que ha generado la situación de Grecia se ha dejado sentir en el mercado de deuda.

Allí, la prima de riesgo de Grecia, que había comenzado la sesión en 915 puntos básicos, subió al cierre de la sesión a 930.

El riesgo de Italia también ha repuntado a 142 puntos básicos, desde los 135 de ayer, y el de Portugal, hasta 213.

Por su parte, la prima de riesgo de España ha rebotado hasta los 120 puntos básicos, desde los 111 en los que comenzó la sesión.