El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, iniciará hoy la que será la primera visita oficial de un jefe del Ejecutivo español a Andorra, y en su transcurso se prevé cerrar un acuerdo bilateral que evite la doble imposición fiscal.

En su primer viaje de 2015, Rajoy se trasladará inicialmente a la localidad leridana de la Seu d''Urgell para reunirse con el obispo de esta diócesis y copríncipe español de Andorra, Joan Enric-Vives.

El sistema político de este pequeño país ubicado en los Pirineos determina un coprincipado episcopal -que le corresponde al obispo de la Seu D''Urgell- y otro francés -que recae en el presidente de Francia, actualmente François Hollande-, así como un jefe de Gobierno, cargo que es desempeñado por Antoni Martí desde que ganó las elecciones de 2011 la coalición de centro-derecha que encabezó.

Tras su reunión con Joan Enric-Vives, Rajoy se desplazará a la frontera hispano-andorrana, donde será recibido por Martí y con quien mantendrá mañana su reunión oficial y presidirá la firma de varios acuerdos.

Pese a la vecindad entre ambos países nunca había habido una visita de estas características desde que España y Andorra establecieron relaciones diplomáticas el 4 de mayo de 1993, cuando el Principado aprobó la Constitución que le configuró como un Estado independiente.

La cita se ha venido ultimando desde hace meses a la espera de cerrar los detalles para la firma del acuerdo que evitará la doble imposición fiscal.

Este convenio, que Andorra ha firmado también con otros países como Francia, pretende facilitar las relaciones comerciales bilaterales para evitar que empresas y personas físicas tributen por un mismo concepto en España y en el Principado.

El presidente de Gobierno andorrano ha destacado la trascendencia que este acuerdo tendrá para los empresarios de su país que deseen invertir en España y ha subrayado que es vital para la apuesta de Andorra por diversificar su economía.

Uno de los motivos por los que Andorra ha tardado en recibir la visita de un presidente del Gobierno español era por la consideración que tenía como paraíso fiscal.

El Principado dejó de tener esa condición para España en febrero de 2011, después de la entrada en vigor de un acuerdo de intercambio de información fiscal.

Las cuestiones de índole fiscal en relación con Andorra han tenido especial notoriedad después de que Jordi Pujol reconociera que había mantenido allí fondos.