Oro Latino cumple este año su primera década en los escenarios. Con la máxima de "renovarse o morir", desde 2005 el colectivo ha sufrido una transformación evidente, al pasar de ocho a cuatro miembros. Pero el principal valor de la formación es su capacidad para "interactuar y animar" al público. Y, si lo requiere el espectáculo, pues utilizan un caballo de palo para cantar la canción de moda; o se caracterizan para interpretar a los personajes de la última canción "picante". Actualmente Oro Latino está compuesto por Jesús Cabrera (saxo, fundador y alma máter de la formación); Nico Monzón (teclado) y los dos solistas, Diego Rodríguez y Tino Lapido Bello, así como Orlando Gómez (técnico de sonido).

Diego Rodríguez explica que las circunstancias económicas obligan a que "los grupos estén en auge". Junto a los éxitos radiofónicos de los últimos meses ("Bailando" o "Caballito de palo"), que los bailan personas de todas las edades, la formación tiene claro que su hábitat son las salas de fiesta, donde, mayoritariamente, el público tiene una edad media o avanzada, por lo que buena parte de su repertorio pasa por adaptar verdaderos clásicos de la música de verbena y la música ligera de los 60, los 70 y 80. Rodríguez comenta que el colectivo vive actualmente "su mejor momento", por la sintonía entre los componentes sobre lo que se quiere hacer. Rodríguez destaca la implicación y el esfuerzo de Jesús Cabrera, arreglista y director, por sus ganas y la inversión que hace para que Oro Latino suene en los escenarios con la mejor calidad posible para un grupo de este tipo.