Acaso la "obertura" esta noche de la XXXI edición del Festival de Música de Canarias en el Auditorio de Tenerife, con lapresencia en la Sala Sinfónica de la Akademie für Alte Musik Berlin (Academia de Música Antigua de Berlín), también conocida como Akamus, junto al contratenor Bejun Metha, represente uno de los mejores "empastes" de una edición que vuelve a reproducir los "silencios" propios de los tiempos de ajuste.

Pero, además de los evidentes atractivos musicales de una programación que brinda esas agradecidas partituras que acompañan a los repertorios barrocos, donde comparten escenario un prestigioso conjunto, la Akamus, y un virtuoso del "instrumento" vocal, el contratenor Bejun Mehta, también se suman otras tesituras, detalles de concepto, que aportan una "coloratura" especial a la audición.

Y es que la génesis de la Academia de Música Antigua de Berlín está acompasada por un evicente espíritu "asambleario". Fue en 1982 cuando un grupo de jóvenes músicos integrantes de varias orquestas de Berlín Oriental se reunieron para crear una orquesta especializada en música antigua que fuera independiente de la "batuta" del Estado.

Este modelo de ensamble se inspira en las academias musicales del tiempo de Federico el Grande de Prusia (1712-1786), en las que se reunían profesionales y amantes de la música para discutir amigablemente e interpretar sus obras favoritas en casa de alguno de ellos.

De hecho, Akamus comenzó su andadura al ritmo de reuniones particulares en las que sus miembros discutían democráticamente sobre la música antigua, una práctica que se conserva viva hasta hoy. De ahí que el grupo no cuente con la figura de un director de orquesta, que sustituyen los concertinos.

Akamus ofrece alrededor de un centenar de conciertos al año, que van desde pequeñas obras de cámara hasta piezas sinfónicas de gran envergadura, y que se interpretan bajo la dirección artística de sus concertinos: Midori Seiler, Stephan Mai, Bernhard Forck y Georg Kallweit.

También numerosos directores y solistas invitados han trabajado con la Akademie für Alte Musik de Berlín. En est ewesentido, Desde hace más de 25 años, la asociación con el contratenor y director belga René Jacobs ha producido muchas exitosas producciones de ópera y oratorio, como wel "Che claro ciel" de hoy.

Desde hace más de 25 años, la asociación de la Akamus con el contratenor y director belga René Jacobs ha producido exitosas producciones de ópera y oratorio, entre las que se incluyen "Che Puro ciel", que hoy se interpreta en el Auditorio.

El éxito internacional de la Akademie für Alte Musik Berlin se debe también a sus más de un millón de discos vendidos al público. Akamus graba exclusivamente para el sello Harmonia Mundi France desde 1994, los CD del conjunto han ganado muchos premios internacionales, incluyendo el Premio Grammy, el Diapason d''Or, el Cannes Classical Award, el Premio Gramophone y el Premio Edison.

Desde hace algo más de una década, la presencia de los contratenores en las programaciones de los festivales ha pasado de considerarse un rasgo exótico y un aspecto llamativo, a incorporarse cada vez con mayor normalidad y en ocasiones casi como una necesidad, sobre todo cuando se trata de interpretar repertorios barrocos.

La figura de Bejun Mehta, nacido en Carolina del Norte (EEUU) hace 44 años, hijo de un pianista y una profesora de canto y sobrino del célebre director indio Zubin, representa la voz de una generación de contratenores alejados del tópico de los "castrati" y acreedores de una sólida y brillante carrera.

Bejun estudió cello, trabajó en la orquesta de San Francisco y se doctoró en literatura germana en Yale. Siendo un veinteañero y tras titubear como barítono, en la cuerda de contratenor reapareció su timbre excepcional. Desde entonces, su registro ha crecido y su expresión artística ha madurado convirtiéndolo en un reclamo para una tesitura que recupera su tono esplendoroso.