Los planes del Tenerife siguen adelante con Carlos Abad-Hernández, el jugador que ha sido noticia estos días por la lesión que sufrió el pasado sábado, en el partido con el Real Betis. El joven portero, que ayer comenzó en El Mundialito el proceso de recuperación de la rotura parcial de ligamento que tiene en la rodilla izquierda y que le impedirá jugar durante un mes y medio, está pendiente de reunirse próximamente con los dirigentes del club para revisar su contrato.
El presidente de la entidad blanquiazul, Miguel Concepción, ya expresó su propósito de garantizar la continuidad de Carlos en la plantilla e impedir que se repita un caso similar al de Ayoze Pérez, que terminó saliendo del Tenerife para jugar en el Newcastle.
El agente de Abad-Hernández, Juan de Dios Carrasco, contó ayer, en Radio El Día, que tiene previsto visitar las oficinas del Heliodoro Rodríguez López "en un espacio corto de tiempo" para"sentar las bases" de la futura relación laboral del guardameta con el club.
Para empezar, Carlos tiene una temporada más de contrato y otra opcional, y una cláusula de rescisión de tres millones de euros, que es "una cifra importante dentro de la categoría". Carrasco advirtió de que las partes todavía no han iniciado las conversaciones y reveló que Concepción le ha aconsejado "tener cautela". Al respecto, sin desvelar si le preocupa más el acuerdo económico que el temporal, señaló que "antes habrá que ver lo que quiere el club".
En esa reunión, el agente informará a los dirigentes del Tenerife sobre las ofertas que ha recibido en las últimas semanas por Carlos, a partir del notable rendimiento que mostró el guardameta desde que debutó en Segunda A el 16 de noviembre, en el campo del Llagostera. "Hemos estado recibiendo muchas llamadas de clubes españoles y otros extranjeros que están interesados en el jugador, pero los hemos emplazado a todos al encuentro que tendremos con el Tenerife, al que le pondremos sobre la mesa las demás ofertas".
Por otro lado, el intermediario se refirió al estado de ánimo de Carlos tras la lesión en el estadio Benito Villamarín. "Es un chico mentalmente muy fuerte", destacó antes de recordar que "ahora tiene que ir paso a paso y recuperarse del todo; y si es en seis semanas, mejor que en ocho". Juan de Dios afirmó que su representado ha crecido "en todos los aspectos" desde que dio el salto a la categoría profesional del fútbol.