Vecinos de La Baranda, en El Sauzal, critican al ayuntamiento por no recibir esta urbanización por lo que consideran "exceso de celo", y recuerdan que en 2006, "hace ya 9 años", el anterior alcalde, Paulino Rivero (CC), firmó un acuerdo para la dotación de servicios y recepción de la urbanización "que aún no se ha cumplido". El actual alcalde, Mariano Pérez (CC), respondió ayer a los vecinos que el acuerdo de 2006 "sí se ha cumplido en lo que respecta a los servicios"; que la zona cuenta con agua, electricidad, alumbrado y recogida de basura, y que la recepción no se ha podido formalizar "por cuestiones técnicas".
El mandatario nacionalista subraya que el consistorio solo podrá recibir la urbanización "cuando lo autoricen los técnicos".
Los vecinos afectados reclaman una reunión entre las cuatro partes implicadas: el Ayuntamiento de El Sauzal, el Cabildo de Tenerife, la promotora de la urbanización y la asociación de vecinos de La Baranda. Esperan que este encuentro sirva para "poner plazos" y piden que esté presente la secretaria municipal para plasmar por escrito el acuerdo y "enterrar de una vez este litigio administrativo".
Recientemente, vecinos de La Baranda se reunieron con la promotora de la urbanización y, según señalan, "los incumplimientos que han detectado los técnicos son algunas aceras deterioradas por la fuerza de las hierbas y algunos solares sin cerramiento".
Tanto la asociación de vecinos como los residentes en la zona se niegan a "aportar más derramas que las que han entregado cuando la urbanización era responsabilidad total de la promotora, para cambiar las farolas, comprar contenedores de basura, arreglar el cuarto de bombeo del agua de consumo, automatizar la cloración del agua y financiar las acometidas de la red de abastecimiento de agua en cada vivienda".
Estos vecinos no entienden que "un acto tan sencillo como recoger la Urbanización La Baranda, donde las grandes obras ya han sido resueltas, se retrase por ese exceso de celo de los técnicos". A su juicio, "se olvida a los habitantes de la zona y la enorme contribución económica de cerca de 200 viviendas al Ayuntamiento de El Sauzal, que debería servir para hacer un esfuerzo y cumplir el acuerdo firmado en 2006 por Paulino Rivero, Arcadio Pérez Dorta y Gerardo de la Rosa, primer presidente de la Asociación de Vecinos de La Baranda".
Pérez se mostró ayer dispuestos a reunirse con todas las partes implicadas, pero recalcó que "se trata de una cuestión técnica y legal, no política". Además, advirtió de que "no se va a recibir la urbanización porque se acerquen las elecciones. El momento lo decidirán los informes técnicos".
Respecto al deterioro de los accesos a la urbanización, los vecinos consideran que "el Cabildo insular debe asfaltar desde la carretera general hasta el aparcamiento de la Casa del Vino".