La imagen de Nuestra Señora de las Nieves estará durante la Bajada de 2015 una semana más de lo habitual en la parroquia matriz de El Salvador, por lo que se amplían los días en los que la Patrona podrá ser admirada en el "corazón" de Santa Cruz de La Palma.

Esta situación se debe al acuerdo entre el ayuntamiento y la Iglesia católica para adelantar al domingo 28 de junio el día de la romería del Trono. Dos semanas más tarde, 12 de julio, la imagen de la Virgen entrará en la ciudad, tras permanecer la noche anterior en la iglesia de La Encarnación. El 5 de agosto, como cada lustro, regresará a su templo.

Esta decisión fue anunciada por el arcipreste Moisés Acevedo, durante la presentación del programa religioso de las Fiestas Lustrales, que se prolongarán desde el 28 de junio al 5 de agosto y en el que se aúna "lo antiguo y lo nuevo", subrayó. Habrá 24 horas por el perdón los días 17 y 18 de julio; un gran encuentro de todas las realidades eclesiales de la Isla el 26 de julio, que concluirá con una misa en la plaza de España; y un acto especial con los enfermos en el hospital de Dolores, así como una procesión de antorchas desde la parroquia de San Francisco a El Salvador, ambas el 2 de agosto.

En el mismo acto, el obispo de la Diócesis Nivariense, monseñor Bernardo Álvarez, presentó la Carta Pastoral que ha dirigido a los palmeros con ocasión de la Bajada de la Virgen. Resaltó el sentido religioso de esta celebración "en la que la fe se hace cultura". El obispo hace una llamada "a ser testigos de esperanza y a vivir una auténtica devoción mariana" que consiste, sobre todo, "en imitar a María, de modo que así la próxima Bajada repercuta en la vida de cada uno y deje huella en cada persona y transforme La Palma desde dentro".

Por último, el responsable arciprestal de Cáritas, Miguel Jesús Guerra, expuso el proyecto solidario con Mauritania que se impulsará con ocasión de esta lustral fiesta. En todas las parroquias de la Isla se hará una colecta que se entregará en la misa ofrenda que cada municipio realiza a la Patrona, que junto con otras acciones servirán para obtener los recursos de cara a la donación de una ambulancia para un barrio de la capital mauritana. El vehículo sanitario servirá para desplazar a los enfermos de una población de unas 92.000 personas al hospital más cercano. De esta manera, indicó, "se trabaja en lo pequeño, sin perder de vista lo global".