Los vecinos de la calle El Escobón y Tulipero, en El Sobradillo, llevan años quejándose de un punto ciego de alcantarillado que tiene filtraciones y, cuando llueve mucho, se rebosa. Servicios Públicos ya tiene la solución, sobre el papel, pero es Emmasa quien tiene que hacer las obras y, al estar intervenida, cualquier trabajo se ha paralizado.

Así, la docena de familias que viven en esta parte de El Sobradillo siguen sufriendo las filtraciones de las aguas negras al subsuelo y los eventuales rebosos del punto ciego. "Este año no fue mucho porque antes de las lluvias vino un camión de Emmasa y sacó 12 cubas", explicó Fernando Méndez, uno de los vecinos de Tulipero.

Ni a la calle Tulipero ni a El Escobón llega el alcantarillado de Santa Cruz de Tenerife, aunque algún vecino asegura que se lo cobran en la factura del agua.

Existe un proyecto ya finalizado de saneamiento de la calle Pelícano (donde se encuentra el punto ciego), de conexión al colector general. El precio de ejecución de la obra es de 34.829,99 euros y la duración es de dos meses.

Esta obra, proyectada desde 2013, forma parte del supuesto Plan de Inversiones al que tiene que hacer frente la empresa mixta de aguas, pero que está paralizado hoy por la intervención de Emmasa, según explicó Dámaso Arteaga, concejal de Servicios Públicos y presidente del Consejo de Administración de Emmasa a este periódico.

"Estamos a la espera de que el interventor saque una propuesta en positivo sobre subcontratación", explicó Arteaga. El edil detalló que Emmasa no realiza estas obras porque no puede subcontratar servicios esenciales y no posee excavadoras ni maquinaria propia.

La obra proyectada que pretendía dar solución a este problema histórico de El Sobradillo consiste en el desvío de las aguas residuales que vienen de la parte alta de Pelícano hasta la calle Bellotero. Se construirán dos pozos nuevos y desde el cruce de las dos calles se deberá conectar a la red general de saneamiento de la calle Bellotero a una cota en la que las aguas fluyan por gravedad, donde se construirá un nuevo pozo que comunique las dos redes.

Según el presidente de la Asociación de Vecinos Siete Islas, Juan Daniel Marrero, casi toda la parte antigua de El Sobradillo carece de alcantarillado. En el caso de la más de una docena de vecinos de Tulipero y Escobón, a su casa solo llegan las aguas negras de las viviendas de la parte alta.

"Es una vergüenza"

El concejal de Sí de Puede, Pedro Fernández Arcila, cree que "es una vergüenza que el Ayuntamiento sea incapaz de realizar unas obras de un bajo coste y que resultan indispensables para la salubridad de las viviendas en la calle de El Escobón". Añade que la filtración de aguas negras "ocasiona un daño muy grave a la salud de las personas y expresa el alejamiento del gobierno municipal en los asuntos vecinales".