Ricardo León no está teniendo suerte en el presente curso. Justo cuando luchaba por entrar en los planes del nuevo entrenador, Raúl Agné, ha sufrido un percance que le mantendrá alejado de los terrenos de juego entre cuatro y seis semanas. Sucedió durante la sesión preparatoria matinal de ayer. Cuando ya entraba en su recta final, el mediocentro se fue al césped con evidentes muestras de dolor. Se llevó la mano al gemelo de la pierna derecha y solicitó la asistencia de los servicios médicos.

Algunos de sus compañeros se acercaron de inmediato para interesarse por el de La Longuera, pero este no pudo reintegrarse al trabajo y hasta necesitó ayuda para abandonar el campo de entrenamiento. Sin poder apoyar la pierna derecha, la preocupación del futbolista blanquiazul resultaba evidente cuando se retiraba hacia los vestuarios. Raúl Agné, atento en todo momento a lo sucedido, dio por terminada la práctica poco después.

Mientras, el jugador abandonaba El Mundialito rumbo a Hospiten Rambla, donde se le practicó la prueba necesaria (una ecografía musculo-esquelética) para conocer el alcance de su lesión. El diagnóstico confirmó los peores presagios: "rotura muscular del gemelo de la pierna derecha". Además, se explica que presentaba "impotencia funcional severa".

Visiblemente afectado, Ricardo ya sabía que estaría de baja algunas semanas cuando esperaba el resultado de la ecografía. Ahora deberá luchar por adelantar los plazos para su reaparición. En principio, se perderá los partidos que deberá jugar el Tenerife ante Mirandés, Valladolid, Las Palmas y Leganés. Si el periodo de ausencia alcanza las seis semanas habría que añadir también los envites ante Recreativo de Huelva y Osasuna, retrasando su reaparición hasta el último choque del mes de marzo.

La competencia en el centro del campo había llevado a Ricardo a tener un protagonismo secundario en la presente temporada. Con Álvaro Cervera en el banquillo, el tinerfeño fue titular coincidiendo con Vitolo y Aitor Sanz. Con frecuencia, desplazado a la banda derecha (en varias ocasiones) o izquierda (Lugo). La falta de continuidad le pasó factura. Quizás por eso, también empezó la etapa de Agné como suplente. Sus compañeros le ganaron la partida. La lesión abre una puerta a la esperanza para Quique Rivero, ausente de la última convocatoria.