El que la sigue, la consigue. Ejemplo de buen trabajo (desde la base hasta el primer equipo), el Tegueste se proclamó campeón de la Liga Insular de Primera Categoría tras casi un cuarto de siglo sin conocer las mieles de la victoria.

El presidente del club teguestero, Marcos Galván (que perteneció al equipo que se hizo con el último título hace casi un cuarto de siglo), reconoció que la consecución del campeonato "fue una alegría inmensa, pese a lo inesperado", puesto que ni los más optimistas pensaban que el Victoria "pincharía" en casa ante el Guamasa. "No habíamos preparado nada, porque teníamos enfrente al Rosario, un buen equipo, que tiene a un puntal como Marcos Ledesma, que está más que capacitado para tirar a nuestros puntales", comentó Galván.

La clave del éxito teguestero se basa en la unión del grupo. Desde la directiva, pasando por los luchadores y terminando por la afición, han conformado un bloque común que ha traído los mejores resultados. "Tenemos una plantilla con gente de la casa, a la que se han sumado luchadores como Óliver Gil (que se "crió" deportivamente en las categorías base teguesteras), Pedro Hernández y los hermanos Eusebio y Juan Jesús Jorge, que han sabido adaptarse al grupo. La confianza y lo duro que trabajan en los entrenamientos ha hecho que seamos muy competitivos", dijo.

Pese a que no es amigo de destacar individualidades, Galván subrayó el papel fundamental que han jugado hombres como José Manuel Rodríguez o Cristian Galván que "vienen empujando fuerte desde abajo", lo que ha hecho "que sus compañeros no se acomoden". Aparte del espectacular rendimiento que ha ofrecido el puntal C Óliver Gil y de la progresiva adaptación de Pedro Hernández a su nueva condición de puntal, el máximo dirigente de la entidad blanquiazul remarcó la recuperación del destacado B Adrián López.

"Es un luchador al que le faltaba madurar psicológicamente porque físicamente siempre ha sido un hombre muy fuerte. Este año ha cogido la regularidad que necesitaba y está rindiendo como nosotros siempre hemos esperado", manifestó Marcos Galván.

En el plano estrictamente deportivo, el mandador del Tegueste, Nacho Ramos (que ha vuelto a sacar su librillo y ha logrado gestionar bien el vestuario), ha contado con dos baluartes en las primeras sillas, como los juveniles Sandro Ramos y Rubén Galván, que han sido artífices de la superioridad del equipo en varias luchadas.

"Tanto Sandro (Ramos) como Rubén (Galván) se están marcando una temporada excepcional. Suelen hacer sus dos puntos correspondientes en el inicio, lo que sin duda, nos permite elegir las sillas y facilita la estrategia", matizó.

Sin embargo, pese a que la recompensa ha llegado en 2015, es necesario tener una mirada retrospectiva de la trayectoria que ha tenido el Tegueste desde la pasada campaña hasta ahora. Encabezado por el puntal A Añaterve Abreu y el puntal C Efraín Perera, el equipo hizo una temporada que muchos hubieran querido firmar. Dos subcampeonatos, en la Liga Regional de Primera Categoría y en la Copa Insular, así como un tercer puesto en la Liga Insular (tras acabar la fase regular invictos) fue el saldo favorable que no obtuvo premio. "A veces el deporte es así. Hicimos una campaña notable, pero no se tradujo en títulos. Está claro que a todos nos gusta ganar, pero el balance fue positivo y acabamos satisfechos", indicó.

Esta reflexión hace que Galván valore doblemente la importancia de haber conseguido el campeonato liguero. "Quizás, el destino nos debía una y ha llegado ahora", apuntó.

Si hay algo que suelen destacar los luchadores teguesteros es el apoyo incondicional por parte de la directiva. Aunque Marcos Galván le reste importancia ("los luchadores son los que se lo han currado", dice), la realidad es que la estabilidad institucional es importante para que todo funcione.

"Nosotros nos limitamos a poner las condiciones necesarias para que el luchador esté a gusto. No metemos presión por ganar, pero sí dejamos claro que dentro del grupo todos tenemos nuestro papel y responsabilidades que afrontar", aseguró.

Asimismo, el presidente del Tegueste analizó el importante rol que ha jugado la afición blanquiazul. "Tenemos la suerte de contar con una de las aficiones más fieles de Tenerife. En todos los terreros, nos sentimos acompañados y eso a los luchadores es algo que los llena de confianza. No tenemos más que palabras de agradecimiento", puntualizó.