La Universidad de La Laguna (ULL) perdió un 3,2% de su plantilla de profesorado entre los cursos 2011-2012 y 2013-2014. Este descenso de sus efectivos docentes -57 trabajadores menos en total- se ha visto acompañada de una importante disminución de la edad media del personal, que, no obstante, sigue siendo de las más altas del país. De hecho, un 16,5% de los profesores tiene entre 60 y 66 años y, por lo tanto, se encuentra en proceso de jubilación.

El Ministerio de Educación hizo pública ayer la estadística de personal universitario correspondiente al curso pasado, de la que se desprende que el promedio de edad de los docentes que prestan servicio en la ULL se sitúa en 46 años, seis menos que en el anterior. Lo cierto es que el conjunto de las instituciones académicas españolas ha experimentado un proceso de rejuvenecimiento. Así, la media nacional del personal docente e investigador (PDI) se cifraba entonces en 48 años y ahora es de 42.

El dato puede parecer positivo a primera vista, pero responde a uno de los principales problemas que han padecido las universidades desde 2011, cuando el Gobierno central impuso estrictos límites a la sustitución de los jubilados mediante la convocatoria de plazas de funcionarios. La acumulación de los retiros que se han producido desde entonces y el hecho de que las pocas plazas que se cubren lo son con trabajadores contratados, generalmente más jóvenes, explican que la media de edad haya disminuido de una forma notable.

La propia estadística del Ministerio revela que el sistema universitario público tiene cerca de 3.900 profesores menos que en el curso 2011-2012, lo que supone un recorte del 3,7%. La Universidad de La Laguna ha pasado en este periodo de 1.768 a 1.711 docentes e investigadores.

La ULL es la segunda universidad pública española más envejecida. Solo la superan en este aspecto la de la Rioja, con 47 años de media, y la UNED, con 48. También es la quinta con una mayor proporción de profesorado en proceso de jubilación, tras las de Santiago de Compostela, Salamanca, Politécnica de Madrid y Complutense. Al mismo tiempo, es la institución con una plantilla joven más exigua. Únicamente el 1,9% de su personal docente cuenta con menos de 35 años.

Si el análisis se limita al profesorado que trabaja en los centros propios -la inmensa mayoría: en la ULL solo 89 del PDI lo hace en centros adscritos-, el resultado es que la Universidad tinerfeña es la más envejecida de España, junto a la de La Rioja, con 47 años de media.

En cuanto a la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), la edad media de su plantilla de profesores es de 45 años y el porcentaje de los que tienen entre 60 y 66 se aproxima al 12%.

La edad parece ir asociada al tipo de relación laboral que une al trabajador con la institución. Un 63% del personal docente de la ULL es funcionario, una proporción que superan muy pocas universidades: la de Almería roza el 69%, Oviedo alcanza el 67%, la Politécnica de Madrid se sitúa en el 66,5% y Santiago de Compostela llega al 63,5%.

Es la edad media de la plantilla de personal docente e investigador (PDI) de la Universidad de La Laguna. La cifra ha descendido en seis años respecto al curso 2012-2013.

Publicada la oferta de empleo para 2015

Once catedráticos, cinco profesores titulares y cuatro contratados doctores. Esas son las plazas de las que consta la oferta pública de empleo de la Universidad de La Laguna (ULL) para 2015, la más numerosa de los últimos años -en 2014 solo se convocaron cuatro- gracias a la cierta flexibilización que ha introducido el Gobierno central en las restricciones a las convocatorias de funcionariado. La resolución de la institución académica que aprueba dicha oferta fue publicada ayer en el Boletín Oficial de Canarias (BOC). De forma paralela, la Universidad ha dado su visto bueno recientemente a los principios generales de mantenimiento, estabilización y promoción de su personal docente e investigador, que incluyen la conversión de las plazas de los asociados a tiempo parcial que sean contratados para cubrir áreas con déficit de profesorado en plazas de ayudante doctor en cuanto sea posible.